El Gobierno de Singapur recortará más de un tercio los sueldos del Presidente, jefe del Ejecutivo y ministros, cuyas remuneraciones son las más elevadas del mundo de cargos públicos, según un informe que presentó hoy un comité gubernamental.

El organismo, creado por el primer ministro, Lee Hsien Loong, tras revalidar el cargo en las elecciones del 7 de mayo, también propone eliminar el plan de pensiones a los nuevos cargos.

Otra medida es el cambio de las bonificaciones salariales en función del aumento del Producto Interior Bruto por otras en las que el cálculo del complemento también incluya la tasa de paro y el aumento salarial real medio de Singapur.

Según la propuesta del comité, que el Parlamento debatirá a finales de mes, el primer ministro verá reducido su salario anual un 36 % hasta los 2,2 millones de dólares singapureses (1,7 millones de dólares o 1,3 millones de euros).

Hasta ahora el salario de Lee, de unos 3 millones de dólares, es unas cinco veces más elevado que el del presidente norteamericano, Barack Obama.

El presidente, que tiene unas atribuciones casi simbólicas, pasará a cobrar 1,54 millones, un 51 % menos, mientras que los nuevos ministros tendrán un recorte del 31 % hasta los 1,1 millones.

Tras ganar las elecciones, Lee se comprometió a revisar los salarios del Ejecutivo para apaciguar el descontento por la creciente distancia entre los salarios de las clases altas y bajas de la ciudad-estado.

Las autoridades de Singapur siempre han defendido los altos sueldos de sus altos cargos en la Administración como una medida necesaria para atraer profesionales con talento y evitar casos de corrupción.

El 7 de mayo, el Partido de Acción Popular (PAP), que gobierna Singapur desde hace más de medio siglo, renovó por amplia mayoría su mandato de cinco años en el Parlamento, aunque vio como la oposición incrementó su número de escaños.