La canciller federal, Angela Merkel, expresó hoy su confianza en que el presidente de Alemania, Christian Wulff, responda a todas las cuestiones abiertas sobre el escándalo por presunto amiguismo e intimidaciones a la prensa, lo que según medios alemanes se producirá hoy mismo.

El viceportavoz del Gobierno, Georg Streiter, afirmó hoy que Merkel sigue "apreciando extraordinariamente" el trabajo de Wulff, envuelto en fuertes presiones desde que se reveló la aceptación del controvertido crédito en condiciones ventajosas, a mediados de diciembre.

El portavoz hizo esta declaraciones después de que en medios alemanes se difundiera que el propio Wulff, de la Unión Cristianodemócrata (CDU) que preside Merkel, tiene previsto conceder una entrevista hoy mismo, probablemente por la noche, a las dos cadenas nacionales de la televisión pública, ARD y ZDF.

Según parece, el presidente no tiene intención de dimitir, pero se encuentra presionado desde sus propias filas para que explique todo lo relacionado tanto con el crédito como con las presuntas intimidaciones al grupo Springer, editor del diario "Bild", que sacó a relucir el caso del controvertido préstamo.

En la fiscalía de Berlín, como en la de Hannover (capital de Baja Sajonia) se han presentado varias denuncias contra Wulff, relacionadas con el crédito y las presiones a los medios.

El caso de presunta intimidación salió a relucir por informaciones del diario "Süddeutsche Zeitung", y posteriormente la redacción de "Bild" confirmó que Wulff llamó a su director, Kai Dieckmann, y al jefe del grupo editorial Springer, Mathias Döpfner, para tratar de impedir la publicación de la primera noticia sobre el crédito.

"Bild" informó el pasado 13 de diciembre de que Wulff recibió en 2008, cuando era jefe del Gobierno de la Baja Sajonia, un crédito de 500.000 euros de un matrimonio amigo, que posteriormente liquidó en condiciones favorables con otro crédito de un banco público.

A esas primeras informaciones sobre el préstamo siguió un reguero de revelaciones acerca de las vacaciones pasadas por el político, siendo "barón" de ese Land, a invitación de hombres de negocios locales, así como otros casos de presunto amiguismo.

Finalmente, dos días antes de Navidad y en medio de fuertes presiones, Wulff compareció ante los medios para pedir disculpas por no haber "procedido con rectitud" respecto al crédito, al no haber informado de éste cuando fue requerido a hacerlo, en 2009, por la cámara regional de Baja Sajonia.

Wulff llegó a la presidencia en junio de 2010 a propuesta de Merkel tras la dimisión de Horst Köhler por unas declaraciones relacionando la misión en Afganistán con los intereses económicos alemanes.