El enviado del Gobierno estadounidense Kurt Campbell se reunió hoy con responsables del régimen comunista chino para analizar el relevo de poder en Corea del Norte, tras la muerte del líder Kim Jong-il, informaron fuentes diplomáticas chinas y estadounidenses.

Campbell, secretario de Estado adjunto para Asia Oriental y Pacífico, mantuvo encuentros con los viceministros de Asuntos Exteriores Zhang Zhijun y Cui Tiankai, confirmó el portavoz de la cartera china Hong Lei, que no detalló el contenido de las conversaciones.

La reciente e inesperada muerte de Kim Jong-il y la sucesión de su hijo Kim Jong-un fueron los principales temas en la agenda china de Campbell, quien hoy proseguirá su gira por Corea del Sur y más tarde viajará a Japón con el mismo propósito.

El actual aperturismo político en Birmania, otro país que como Corea del Norte ha tenido a China como uno de sus escasos aliados internacionales durante décadas, también se trató en las charlas, señalaron fuentes de la delegación estadounidense.

Sobre la cuestión norcoreana, el portavoz de Asuntos Exteriores chino también desmintió hoy que el nuevo máximo líder norcoreano vaya a viajar próximamente a China, como señalaron algunos medios de Corea del Sur, si bien Pekín ha reiterado en varias ocasiones que desea continuar los intercambios de visitas con Pyongyang.

China es el principal suministrador de ayuda económica y humanitaria a Corea del Norte, país al que apoyó militarmente hace 60 años en su guerra con el Sur, aunque tras la muerte de Kim el régimen comunista chino ha intensificado sus contactos con otros países de la región para buscar estabilidad en la zona.

La semana pasada visitó China el primer ministro japonés, Yoshihiko Noda, y hoy Seúl y Pekín confirmaron que el próximo día 9 hará lo propio el presidente surcoreano, Lee Myung-bak, también con la cuestión norcoreana como principal tema en la agenda.

El portavoz Hong detalló hoy que el presidente chino, Hu Jintao, y el primer ministro, Wen Jiabao, mantendrán encuentros con Lee en los que se tratarán asuntos regionales de interés común.

La visita se enmarca en el vigésimo aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre los dos países (hasta los años 90 China no reconoció la existencia de Corea del Sur como Estado, precisamente por su afinidad con Corea del Norte).