Con la resaca de las fiestas, Estados Unidos se prepara para el inicio del proceso que decidirá quién competirá con Barack Obama en las elecciones presidenciales de noviembre.

En un par de días comienza el Partido Republicano su campaña de primarias de la que saldrá el rival de Obama, quien opta a un segundo mandato y último, ya que las leyes estadounidenses no le permitirían volver a repetir.

Los demócratas no celebrarán primarias puesto que la candidatura de Obama no ha encontrado competidor, así que la primera cita de los republicanos será mañana en Iowa, un Estado agrícola del medio oeste donde los aspirantes buscan la primera victoria en un largo proceso que se espera reñido.

De momento, encabezan las encuestas el expresidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich, el exgobernador de Massachusetts Mitt Romney y el congresista ultraliberal Ron Paul.

El gobernador de Texas, Rick Perry, la congresista del Tea Party Michele Bachmann y el senador Rick Santorum les siguen, esperando su momento de gloria, y el exembajador en China Jon Huntsman, ante la falta de opciones en Iowa según las encuestas, ha optado por concentrar sus fuerzas en las siguientes primarias de Nuevo Hampshire.

Los aspirantes saben de la importancia que tiene quedar bien en esta primera prueba.