El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) informó ayer de que existen indicios de que Irán ha mantenido hasta un pasado reciente actividades que solo pueden estar relacionadas con el desarrollo de armas nucleares.

Los datos que el organismo ha recibido de varios países miembros señalan que Teherán "ha llevado a cabo actividades relevantes en el desarrollo de un artefacto explosivo nuclear", asevera el director general del OIEA, Yukiya Amano, en un informe sobre Irán emitido ayer en Viena.

El texto, enviado a los Estados miembros y al Consejo de Seguridad de la ONU, agrega que "la información también indica que antes de 2003 estas actividades se realizaban bajo un programa estructurado y que algunas podrían continuar todavía". Entre estas actividades, la agencia de la ONU destaca trabajos en el desarrollo de lo que califica como un "diseño propio" para un arma nuclear, además de la compra de información y documentación a una red clandestina de material atómico, según un extenso documento confidencial.

En él, los inspectores detallan las informaciones sobre supuestas dimensiones militares del programa nuclear iraní como, por ejemplo, experimentos con explosivos especiales o el desarrollo de detonadores. A esto, agregan que Teherán ha llevado a cabo "esfuerzos para desarrollar vías no declaradas de producción de material nuclear".

Además, militares iraníes habrían intentado, a veces con éxito, adquirir equipos nucleares y de uso civil y militar, añade el documento, uno de los más delicados de los últimos años y que viene precedido por muchas especulaciones, especialmente en Israel, sobre un posible ataque para neutralizar el programa atómico de Irán.

Según el OIEA, que investiga desde hace ocho años las actividades nucleares iraníes, Teherán ya ha producido casi cinco toneladas de uranio enriquecido, más que suficiente, de acuerdo con los expertos internacionales, para fabricar varias bombas.

El Gobierno iraní consideró el documento como "una repetición de las acusaciones infundadas de EEUU y los sionistas" y lo calificó de "ridículo e inventado".

En esta línea, el presidente, Mahmud Ahmadineyad, reiteró que no pretende fabricar bombas nucleares y acusó a EEUU de tratar de saquear la riqueza de su país.