El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Ali Akbar Salehi, dijo hoy en Viena que su país ha acordado con el OIEA un "nuevo mecanismo" para esclarecer la verdadera naturaleza y las supuestas dimensiones militares de su controvertido programa nuclear.

Tras una reunión con el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Yukiya Amano, el ministro iraní habló de "conversaciones muy fructíferas".

Además, destacó que el responsable máximo del organismo "trata de ser lo más imparcial posible", lo que contradice algunas recientes acusaciones de Teherán, que había criticado la supuesta imparcialidad de Amano en la investigación iraní.

Desde la llegada de Amano al frente del OIEA en diciembre de 2009, las relaciones entre el organismo de la ONU e Irán se habían enfriado notablemente, debido al lenguaje más directo del japonés en sus informes técnicos sobre Irán.

En esos documentos, que se basan en el trabajo de los inspectores de desarme del OIEA, se ha llegado a acusar a Irán de haber realizado hasta hace poco trabajos militares en su programa nuclear, algo que Teherán rechaza con vehemencia.

La reunión de Amano y Salehi terminó hoy sin acuerdos concretos, pero con algunas promesas de parte de Irán para seguir cooperando.

"Nosotros (Irán) hemos prometido que vamos a trabajar más y con más profundidad que antes. Hemos prometido mantener nuestras consultas, para pensar en vías innovadoras para trabajar juntos y para poder resolver este asunto", aseguró Saheli ante la prensa.

Occidente, con Estados Unidos a la cabeza, teme que Irán esté trabajando en un programa nuclear militar bajo el paraguas de un programa civil para la generación de energía atómica.

Irán asegura que no tiene intenciones de ese tipo y dice que centra sus esfuerzos en la producción de combustible nuclear y la generación de energía atómica.