La ministra austríaca de Finanzas, María Fekter, dijo hoy que existe un "gran consenso político" sobre el plan de ajuste del titular italiano de Economía, Giulio Tremonti, y que la UE confía en que el programa para 2011-2014 será aprobado.

"Italia cerrará hoy el plan de ajuste hasta 2014. Hay un gran consenso político y por eso confiamos mucho en la en que todo saldrá bien", afirmó Fekter en Bruselas, donde participa en el Consejo de ministros de Finanzas de la Unión Europea (UE).

Tremonti abandonó la reunión del Ecofin para cerrar los últimos detalles del plan de ajuste preparado por el Gobierno.

"Hemos trabajado mucho y ahora el debate continúa sobre otros temas. Estoy volviendo a Roma para cerrar las medidas presupuestarias", anunció Tremonti al abandonar Bruselas.

El Gobierno de Silvio Berlusconi ha preparado un plan de ajuste por valor de unos 48.000 millones de euros, pero su contenido sigue siendo incierto aún.

Los medios de comunicación italianos informaron de que el plan de ajuste podrá llegar el próximo jueves al Parlamento para comenzar su aprobación.

En cuanto a Grecia, Fekter dijo que los titulares de Finanzas de la Eurozona continuarán discutiendo la estrategia que han elegido seguir hasta ahora para un segundo rescate, pero reconoció que es necesario analizar cómo se puede ampliar esa perspectiva.

"Hemos decidido que hay que discutir sobre varios modelos de participación privada y sobre lo que aportarían, tanto para los países rescatados como para los Estados que prestan la ayuda", afirmó después de que el Eurogrupo no llegara ayer a ningún acuerdo.

Fekter explicó que los ministros de Finanzas de la zona euro no abordaron en su reunión su malestar con las agencias de calificación de riesgos.

La rebaja de Moody''s de la calificación de la deuda portuguesa a la categoría de "bono basura", despertó las críticas de varios países y de instituciones europeas, entre ellas la Comisión Europea (CE), que consideró que la agencia basó su decisión en criterios "hipotéticos

La ministra dijo estar a favor de la creación de una agencia europea de calificación y también de que la autoridad supervisora de los mercados (ESMA, en inglés) certifique a las agencias.

"Hemos realizado una reforma y esperamos de las entidades estadounidenses que se sometan" a las mismas, concluyó.

Hasta este mes las agencias de calificación tenían que registrarse en los entes reguladores de cada estado de la Unión Europea (UE), que, sin embargo, siguen una misma normativa, aprobada a nivel comunitario.

Con las modificaciones acometidas, a partir de ahora, las agencias deben registrarse en la ESMA, que será la encargada de supervisar los criterios y métodos utilizados para otorgar calificaciones.

Entre los nuevos cambios previstos por la CE está "mejorar la metodología" usada por estas entidades a la hora de establecer los "ratings" y asegurar que la ESMA controla correctamente cómo llevan a cabo sus análisis.