El conglomerado CIR (Compañías Industriales Reunidas), beneficiario de la sanción de 560 millones de euros que Fininvest deberá pagar por el caso Mondadori, niega que la condena al grupo empresarial del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, tenga alguna relación con la "actualidad política".

En un comunicado divulgado hoy, CIR, editor del diario "La Repubblica" (uno de los más críticos con Berlusconi), asegura además que la sentencia depositada este sábado por el Tribunal de Apelación de Milán contra Fininvest confirma que la editorial Mondadori le fue "sustraída" mediante la corrupción de un juez, "organizada por cuenta y en interés" del grupo del primer ministro.

"El contencioso judicial sobre el caso Mondadori, relativo a hechos ocurridos hace más de veinte años, tiene que ver con una historia empresarial y es completamente ajeno a la actualidad política", indica el conglomerado italiano.

Los hechos del caso Mondadori se remontan a hace más de veinte años, cuando Fininvest y CIR recurrieron a la justicia para que decidiera quién tenía derecho a quedarse con las acciones de la familia Formenton, herederos del dirigente de la editorial, Arnoldo Mondadori, que daban el control de la empresa.

Un juez dio la razón en 1991 a Berlusconi, pero posteriormente el caso se reabrió por la vía penal para averiguar si habían existido irregularidades en el proceso y el exabogado del primer ministro Cesare Previti fue condenado por sobornar a uno de los jueces.

En octubre de 2009 el Tribunal Civil de Milán condenó en primer grado a Fininvest a pagar 750 millones de euros a CIR por los daños patrimoniales causados en la pugna por Mondadori, pero este sábado la sanción se redujo en apelación hasta los 560 millones de euros.

En la sentencia de hoy "se reconoce además el derecho de CIR a un resarcimiento congruente por el daño sufrido. Tal daño, enorme ya en origen, se ha incrementado después notablemente por revalorización e intereses en consideración del largo tiempo transcurrido desde los hechos", dice CIR, controlada por el empresario Carlo de Benedetti.

"Con particular satisfacción se registra el apartado de la sentencia donde se reconoce que, corrompiendo al juez Metta, Fininvest le quitó a CIR no solo la simple oportunidad de ganar en 1991 la causa sobre el control del grupo Mondadori, sino que le privó de una victoria que, sin la corrupción judicial, habría sido segura", añade.

La primogénita del primer ministro italiano y presidenta de Fininvest, Marina Berlusconi, afirma, por su parte, en otro comunicado, que esta condena es una nueva "agresión" hacia su padre, como las que se han llevado a cabo en los últimos años "con todos los medios y en todos los frentes".