El ministro francés de Asuntos Exteriores, Alain Juppé, aseguró hoy que el objetivo de la intervención militar en Libia no es matar al líder Muamar el Gadafi y calificó la reciente muerte de uno de sus hijos como un "daño colateral".

"Nuestro objetivo no es matar a Gadafi", declaró el jefe de la diplomacia gala en "France 24", quien aseguró que la coalición internacional que interviene en Libia se centra en "objetivos militares en Trípoli".

Preguntado sobre si la intervención en Libia se ha "atascado" el ministro de Asuntos Exteriores dijo que es "prematuro" hablar en esos términos y vaticinó un pronto final del conflicto.

"Tras siete semanas, no se puede hablar de atasco. Espero que no dure más de algunas semanas, como mucho algunos meses, pero es prematuro hablar de atasco".