Fuerzas del gobierno palestino de Hamás en Gaza asaltaron ayer el refugio de los presuntos asesinos del italiano Vittorio Arrigoni, en una operación que concluyó con la muerte del jefe del comando islamista, el jordano Abdelrahman Brizar.

"Brizar lanzó una granada a sus compañeros y luego se suicidó", informó el Ministerio del Interior después de comenzar el asalto a la vivienda en el campo de Nusseirat en la que se habían refugiado los presuntos asesinos del activista.

En un comunicado, el Ministerio aseveró que "la operación ha terminado después de cuatro horas" con el asalto de las fuerzas que habían rodeado el inmueble y tras un prolongado tiroteo en el que resultaron heridos leves tres agentes y un menor de edad.

Otros dos activistas del grupo salafista "Al Yihad Al Tawhid" que se encontraban con Brizar resultaron heridos como consecuencia de la explosión de la granada, uno con heridas graves y el otro leves.

Un cuarto activista que fue identificado pero que era propietario de la vivienda fue detenido antes de comenzar la intervención policial.

Las fuerzas de Hamás habían conseguido dar con el paradero de los cuatro sospechosos a primera hora de la tarde, a raíz de la publicación el pasado lunes de sus fotografías y nombres en internet y colgar carteles de búsqueda y captura por toda la franja.

Los otros tres integrantes del grupo terrorista son Mohamed Brizar, hermano del jefe del comando, Muhamad Nimer Salfiti, y Bilal Al Omari.