El primer ministro británico, David Cameron, dijo ayer que los términos estipulados en la resolución de la ONU "dificultan" la operación militar de la coalición internacional en Libia para proteger a la población civil, pero considera que esas restricciones son las "correctas". En declaraciones a la cadena británica de televisión Sky News, el jefe del Ejecutivo se refirió a que la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas autoriza a los países aliados llevar a cabo ataques aéreos selectivos en Libia, pero no una intervención terrestre, lo que, según Cameron, hace que la tarea sea más "difícil".

No obstante, el líder conservador enfatizó que esas restricciones impuestas por la ONU a los países de la coalición internacional eran las "correctas". "No estamos ocupando, no estamos invadiendo, no se trata de eso. Y eso es, obviamente, una restricción para nosotros, pero creo que es la restricción correcta", observó.

Camaron añadió que precisamente porque "hemos dicho que no vamos a invadir, esto es mucho más difícil en muchos aspectos, puesto que no podemos determinar completamente el resultado con lo que tenemos disponible. Pero tenemos muy claro que debemos ajustarnos a los términos de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU y debemos mantener el apoyo del mundo árabe".

Mientras, al menos seis personas murieron ayer y otras 47 resultaron heridas en los bombardeos de las últimas horas lanzados por las fuerzas leales a Muamar al Gadafi contra la ciudad libia de Misrata, según informó la cadena de televisión Al Yazira.

La emisora catarí, que cita como fuente a un portavoz de los rebeldes libios, asegura que las fuerzas de Gadafi lanzaron misiles "Grad" y usaron artillería pesada, que causó graves daños en algunas zonas residenciales e industriales de Misrata. La ciudad, la tercera en importancia del país y sitiada por las fuerzas gadafistas desde hace casi dos meses, lleva cuatro días consecutivos sometida a un intenso bombardeo, que ha causado ya decenas de muertes. Entre los heridos causados ayer figuran mujeres y niños, según la cadena, que difundió imágenes de civiles llorando ante los cuerpos sin vida de sus seres queridos, envueltos en sábanas o mantas.

Por su parte, los cazabombarderos de la Alianza Atlántica llevaron a cabo ayer nuevos ataques aéreos en la región de M''hira, a unos 50 kilómetros al sur de Trípoli, según la cadena de televisión estatal Libia TV. Este medio, que citó fuentes militares, informó de que los ataques del "enemigo colonialista cruzado" se efectuaron a última hora de la mañana, pero no precisó la naturaleza de los blancos ni qué daños infligieron. La región de M''hira ya fue blanco el sábado de los ataques aéreos de la OTAN, que también bombardeó Sirte, la localidad natal de Gadafi.

Sobre el futuro de la operación, el ministro francés de Defensa, Gérard Longuet, dijo ayer que la guerra puede prolongarse, según recoge el diario "Le Parisian". El ministro, que visita en Afganistán a las tropas francesas, opinó que existe un "riesgo" de que el conflicto se prolongue porque Gadafi y Libia "no son completamente previsibles" y precisó que la intervención es "larga y complicada".

Asimismo, el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, abogó ayer por "mantener la presión militar" para lograr la salida de Gadafi del poder.