> El primer ministro japonés, Naoto Kan, ha admitido este lunes que no continuará con los proyectos actuales de construir nuevos reactores nucleares, en una comparecencia ante la Comisión Presupuestaria del Parlamento nipón.

Kan ha subrayado que el Gobierno necesita revisar y reconsiderar su política nuclear tras el accidente en la central nuclear de Fukushima, según ha informado la agencia de noticias nipona Jiji.

No obstante, ya en marzo, en una reunión mantenida con el líder del Partido Comunista nipón, Kazuo Shii, Kan dejó entrever que el Gobierno estaba sopesando revisar su política nuclear.

El Ejecutivo pretendía construir hasta 2030 cerca de catorce reactores nucleares, cuando, en la actualidad, Japón tiene un total de 54, contando los de la central de Fukushima-1, gravemente dañada el pasado 11 de marzo por el terremoto y posterior tsunami que asoló la costa noreste japonesa.

LA CRISIS NUCLEAR DE FUKUSHIMA

En esta misma sesión parlamentaria, Kan ha sido criticado por su actuación en la crisis nuclear de Fukushima. "El primer ministro Kan está trabajando duro y debe estar sufriendo dificultades, pero mucha gente tiene dudas sobre su liderazgo", ha afirmado Masashi Waki, miembro del opositor Partido Liberal Democrático (PLD).

Kan ha respondido que el Gobierno lo está haciendo lo mejor posible. "Japón ha sufrido varias crisis en el pasado, pero creo que esta es la más grave de los últimos 65 años desde la Segunda Guerra Mundial", ha señalado.

El primer ministro ha añadido que "deben insistir" y "esforzarse todo lo posible" en reconstruir el país y resolver la crisis nuclear.

En alusión a la situación actual de la central de Fukushima-1, la Agencia de Seguridad Nuclear (ASN) japonesa ha afirmado que los niveles de radiación en los reactores están dificultando las tareas de mantenimiento.

"Sumergir el combustible en agua del combustible significaría tardar mucho más tiempo en enfriar el combustible", ha asegurado el vicepresidente de ASN, Hidehiko Nishiyama, que ha confirmado que los ingenieros están explorando nuevos métodos de enfriamiento.

"Para nosotros, ser capaces de desmantelar las barras de combustible y llevarlas a otro sitio llevará años", ha añadido Nishiyama.

En alusión a las declaraciones realizadas ayer domingo por TEPCO, que aseguró esperar que la situación de los reactores se estabilizará por completo en seis o nueve meses, el portavoz del Ejecutivo, Yukio Edano, ha sostenido que esos plazos serán alcanzados si "todo va bien".

Sin embargo, Edano ha asegurado que la plena recuperación tardará en alcanzarse aún más tiempo, ya que la reconstrucción de la zona costera del noreste del país aún no ha comenzado.

UN NUEVO PRIMER MINISTRO Y UN GOBIERNO DE COALICIÓN

Cerca de un 70 por ciento de los japoneses se muestra a favor de un cambio de primer ministro, además de considerar inadecuada la gestión del Gobierno de la crisis nuclear, según ha revelado una encuesta realizada por el diario de negocios nipón ''Nikkei''.

Asimismo, más de la mitad de los encuestados pide que gobierne en coalición con el opositor PLD, según han mostrado los resultados de otro sondeo realizado por el diario japonés ''Mainichi''.

Kan ya propuso al PLD formar una coalición de unidad nacional, pero la formación opositora se negó y conminó a Kan a que dimitiera. El Partido Democrático Japonés (PDJ) gobierna en mayoría simple y necesita del apoyo de la oposición para aprobar cualquier propuesta de ley.

"Es imposible que se cambie de primer ministro en estos momentos", ha afirmado Hajime Ishii, un importante miembro del PDJ. "Los países extranjeros lo verían como algo anormal, en un momento en el que debemos trabajar en reconstruir el país después del terremoto", ha añadido Ishii, que ha rechazado la posibilidad de celebrar una votación en el seno del PDJ para elegir a un nuevo líder.

Ishiii ha dicho que una "gran coalición" sería inviable y "los votantes se sentirían traicionados".