Los ministros de Exteriores árabes estudiaron hoy en El Cairo el envío de una delegación egipcio-argelina a Trípoli para abrir un diálogo con el líder libio, Muamar el Gadafi, y hallar "una salida segura" para él y su familia.

Fuentes diplomáticas árabes dijeron que los ministros, que todavía están reunidos, aún no han tomado una decisión sobre esa propuesta para encontrar "una salida segura" para Gadafi, que garantice la integridad del pueblo libio y del dirigente y su familia.

Las fuentes no especificaron si esa iniciativa se refiere a que Gadafi abandone el poder o el país.

Sin embargo, según las fuentes, existen temores entre los ministros de que la propuesta conceda a Gadafi una legitimidad árabe que se contrapone a la resolución del Consejo de la Liga Árabe del pasado día 22 de prohibir a Libia la participación en sus reuniones.

Asimismo, las fuentes subrayaron que los árabes temen que se emita una resolución internacional para la creación de una zona de exclusión aérea en Libia porque, a su juicio, eso perjudicaría a Egipto, que tiene numerosos ciudadanos viviendo en el país vecino y a los que no se podría evacuar dado el caso.

Con anterioridad, un responsable diplomático, que pidió el anonimato, reveló que los titulares de Exteriores habían acordado aplazar hasta el 15 de mayo la cumbre de jefes de Estado árabes que se iba a celebrar el 29 de marzo en Bagdad por "los sucesos actuales en el mundo árabe".

En esa cumbre, Libia, que ocupa la presidencia rotatoria de la organización panárabe, debería traspasarla a Irak, país anfitrión de la cita.