Irán y los países del Grupo 5+1 concluyeron ayer en Ginebra la primera jornada de negociaciones sobre el controvertido programa nuclear iraní, después de un año de interrupción, y acordaron continuar hoy los contactos.

Según informó Maja Kocijancic, portavoz de la diplomacia europea, Catherine Ashton, la reunión, que había comenzado a las 10:00 horas en la sede de la misión de Suiza ante la ONU, concluyó hacia las 19:30.

Poco ha trascendido sobre esta cita que se celebró marcada por la tensión tras recientes acontecimientos, como los atentados contra dos científicos nucleares iraníes que Teherán achaca a Occidente, y tras el anuncio ayer de la República Islámica de que había logrado producir su primer lote de concentrado de uranio, que sirve de base a la producción de uranio enriquecido.

Fuentes cercanas a las delegaciones participantes revelaron que durante la mañana tuvo lugar un sesión plenaria entre Ashton, el jefe negociador iraní, Said Jalili, y representantes del llamado grupo 5+1, los miembros permanentes del Consejo de Seguridad (EEUU, Rusia, Reino Unido, Francia y China) más Alemania.

En ella, de acuerdo con fuentes iraníes, Jalili sacó a relucir el asunto de los atentados, en los que murió uno de los científicos y que Irán atribuye a servicios secretos de Occidente.

Al respecto, según aseveró una fuente cercana al encuentro, "la obra de teatro permitió esta mañana que cada actor expusiera su posición" y cada parte subrayara sus posiciones.

Tras ello, y después de una comida, comenzaron reuniones bilaterales de las que apenas se sabe nada, aunque fuentes diplomáticas indicaron que hubo un "cara a cara" entre Jalili y el negociador de EEUU, William Burns, secretario de Estado adjunto para Asuntos Políticos.

Entre las escasas declaraciones escuchadas por los periodistas, fuentes iraníes aseguraron que la jornada celebrada ayer fue "constructiva", pero apenas se conoce el contenido de lo tratado.