El presidente de EEUU, Barack Obama, instó hoy a israelíes y palestinos a aprovechar la nueva oportunidad para la paz en Oriente Medio, al emitir su mensaje sobre Rosh Hashaná, la fiesta del año nuevo judío 5771.

"Mientras los judíos en EEUU y todo el mundo celebran el primero de los días más sagrados, quiero extender mis calurosos deseos para el Año Nuevo", dijo Obama en un vídeo emitido por la Casa Blanca.

Agregó que la efeméride debe servir para la reflexión y para reafirmar la creencia en "el poder de la humildad y la compasión para profundizar nuestra fe y para reparar nuestro mundo".

En ese sentido, el mandatario estadounidense dijo que en unos momentos en que israelíes y palestinos han regresado al diálogo directo, le corresponde a EEUU "alentar y apoyar a quienes están dispuestos a superar sus diferencias y trabajar por la seguridad y paz en Tierra Santa".

Sin embargo, reconoció que "el progreso no será fácil, ni vendrá rápido", con lo que Obama intentó minimizar las expectativas en torno a esta ronda de negociaciones.

"Pero hoy tuvimos una oportunidad de seguir adelante, hacia la meta que compartimos, dos estados, Israel y Palestina, viviendo lado a lado en paz y seguridad", enfatizó Obama.

Sus declaraciones se produjeron mientras los israelíes y palestinos se preparan para una segunda ronda de negociaciones de paz para Oriente Medio, entre el 14 y 15 de septiembre próximos, tal como acordaron al reiniciar las conversaciones en Washington la semana pasada.

Obama, quien ya afronta presiones internas por la lenta recuperación económica y la guerra en Afganistán, ha querido invertir capital político también en el diálogo directo entre israelíes y palestinos para poner fin a décadas de conflicto.

Tal como lo hiciera en Washington, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, reiteró hoy su deseo de que EE.UU. presione a Israel por una prórroga a la moratoria a los asentamientos judíos en Cisjordania, que vence el próximo 26 de septiembre.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por el momento, ha resistido las presiones internacionales para extender la moratoria de diez meses.