Jaroslaw Kaczynski presentó ayer su candidatura a jefe de Estado de Polonia en las elecciones del 20 de junio para intentar "completar la misión" de su hermano gemelo y presidente del país Lech Kaczynski, fallecido en un reciente accidente aéreo. Tras la desaparición de Lech, su hermano gemelo emerge como la última esperanza de los conservadores polacos del partido Ley y Justicia (PiS) para seguir en la Jefatura de Estado.

Muchos creían que Jaroslaw Kaczynski, abatido por la trágica muerte de su hermano en el accidente aéreo en la base militar rusa de Smolensk, no presentaría su candidatura para los comicios presidenciales. Sin embargo, Jaroslaw Kaczynski afirma haber encontrado en su devoción a Polonia su "gran obligación", la razón para "sobreponerse al dolor personal".

Lo cierto es que el político quedó visiblemente derrumbado por la trágica muerte de su hermano y su cuñada, Maria Kaczynska, además de otros compañeros de su partido que figuraban entre las 96 víctimas del avión presidencial que se estrelló el 10 de abril en Rusia.

"La trágicamente interrumpida vida del presidente y la muerte de la elite patriótica de Polonia sólo tienen un significado para nosotros: debemos finalizar su misión", destaca un comunicado que adelanta el mensaje central de PiS en la inminente campaña electoral.

"Se lo debemos (a los fallecidos), se lo debemos a nuestra patria, es nuestra obligación completar sus voluntades", dice el texto firmado por Jaroslaw Kaczynski, donde el patriotismo y el sentido de Estado justifican su decisión de lanzarse al ruedo electoral, a pesar del dolor personal y de unos sondeos que sitúan al candidato liberal, Bronislaw Komorowski, como claro favorito.

De hecho, en la última encuesta realizada por el instituto GfK Polonia, Komorowski obtendría un 49% de la intención de voto, mientras que Jaroslaw Kaczynski conseguiría un 26 por ciento.

Aunque este estudio se hizo antes de que el líder conservador presentase su candidatura, lo cierto es que muchos polacos ya dan por sentado que la victoria será para Bronislaw Komorowski, jefe del Estado en funciones y presidente del Sejm, el parlamento polaco.

Se da la circunstancia de que Komorowski perdió a sus dos principales rivales en el siniestro aéreo, donde además de Lech Kaczynski, presidente y candidato conservador a renovar su mandato, falleció el candidato de la izquierda polaca, Jerzy Szmajdzinski.

Jaroslaw Kaczynski afirma que quiere ser ahora el presidente de todos aquellos que quieren "continuar el trabajo de las víctimas del desastre de Smolensk, de quienes quieren una Polonia recta", de quienes consideran que "Polonia es lo más importante", de los ciudadanos que buscan rescatar el auténtico espíritu del sindicato Solidaridad.

"Desafortunadamente Jaroslaw no tiene casi opciones de ganar los comicios y sólo en el caso de que sus rivales cometan errores de bulto podrá tener posibilidades", explicó la socióloga Paulina Pruszka.

La candidatura de Jaroslaw Kaczynski fue anunciada pocas horas antes del cierre del plazo para la presentación de listas a la presidencia de Polonia, una cita electoral anticipada en la que finalmente concurrirán dieciséis candidatos.

El partido conservador Ley y Justicia considera que Jaroslaw Kaczynski es el "sucesor natural de Lech Kaczynski", único capaz de hacer frente a Bronislaw Komorowski, y la dirección de la formación confía en que la candidatura de Jaroslaw Kaczynski pueda forzar una segunda vuelta en las elecciones, lo que haría que todo se decidiese el 4 de julio entre los dos políticos más votados.

Jaroslaw Kaczynski (Varsovia, 1949) fue primer ministro de Polonia entre 2006 y 2007, en que el país se convirtió en la única democracia occidental en estar gobernada por dos hermanos gemelos, ya que Lech era el presidente.