El Parlamento argentino aprobó en la madrugada de ayer un polémico proyecto de ley de servicios audiovisuales impulsado por el Gobierno de Cristina Fernández tras un intenso debate que se prolongó durante más de 13 horas y que terminó con la retirada de la oposición para no participar en la votación.

El proyecto de ley, que ha provocado el rechazo frontal de opositores y grandes medios del sector audiovisual, fue aprobado por 146 votos -del oficialismo y grupos minoritarios afines-, 3 votos negativos y 3 abstenciones.

Las principales fuerzas de oposición acordaron abandonar el recinto antes de la votación en protesta por supuestas "irregularidades" en el tratamiento del proyecto.

La iniciativa, una de las más importantes apuestas del Gobierno de Cristina Fernández, pretende sustituir a la legislación vigente desde la última dictadura militar (1976-1983) y debe todavía ser aprobada por el Senado, previsiblemente durante el próximo mes de octubre.