Los electores californianos rechazaron en las urnas las medidas económicas de emergencia contra el déficit estatal defendidas por el gobernador Arnold Schwarzenegger, unos resultados que cuestionan su capacidad de liderazgo.

Los votantes castigaron la gestión financiera de Schwarzenegger y el resto de legisladores estatales en este referendo, en el que los políticos habían intentado sacar adelante unas reformas fiscales que lograsen aplacar la deuda multimillonaria que acumulan las arcas públicas californianas. Sólo una de las seis propuestas incluidas en el plebiscito del martes fue autorizada por los electores, la que impedirá que los políticos se suban el sueldo en época de déficit presupuestario, que salió adelante con el respaldo de más del 73% de los votos.

"Hoy hemos escuchado a los votantes y respeto la voluntad de la gente que está frustrada con la disfunción de nuestro sistema presupuestario. Ahora tenemos que se-guir adelante y enfrentar la crisis fiscal con soluciones constructivas", aseguró Schwarzenegger en un comunicado.