El ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Taib Fasi Fihri, ha entregado al Consejo de Seguridad de la ONU una carta en la que insta a este organismo a "asumir responsabilidades" respecto a lo que considera una "violación del alto el fuego" por el Frente Polisario.

El mensaje, enviado a instancias del rey Mohamed VI, llama a la ONU a "tomar las medidas pertinentes" después de que un grupo de saharauis cruzase ayer la alambrada que rodea el muro de arena de 2.800 kilómetros que delimita el territorio del Sahara Occidental administrado por Rabat.

Dos jóvenes saharauis de 16 y 21 años resultaron heridos al pisar una mina anti-persona después de traspasar la alambrada, cuando participaban en una cadena humana para exigir el derribo del muro militar marroquí. El acto de protesta, en el que tomaron parte 2.500 personas, principalmente españoles y saharauis, transcurría de forma tranquila hasta que un centenar de manifestantes saltó la zona de seguridad de la concentración y algunos de ellos se adentraron en la alambrada que rodea el muro.

La carta de Marruecos, dirigida al presidente de turno del Consejo de Seguridad, el mexicano Claude Heller, insiste en que Naciones Unidas "debe tomar las disposiciones necesarias para asentar su autoridad en la zona situada entre el dispositivo de defensa y los territorios argelino y mauritano".

El mensaje recuerda que, según el acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Marruecos y el Polisario en 1991, "ningún hecho consumado o cambio del statu quo está permitido".

Marruecos "se reserva el derecho de tomar todas las medidas necesarias para poner fin a tales actuaciones, preservar su seguridad nacional y asegurar la tranquilidad de su población", añade la nota.

Asimismo, el ministro acusa a Argelia de la preparación y la ejecución de la acción, ya que los manifestantes provenían de territorio argelino.

Por otra parte, cerca de 300 personas, entre saharauis y españoles, se manifestaron ayer en el campo de refugiados 27 de Febrero para mostrar su solidaridad con los dos heridos el viernes en la explosión de una mina.

Durante la marcha, que se desarrolló entre el campo del 27 de Febrero y la sede la Unión Nacional Saharaui, los manifestantes corearon consignas como "Marruecos culpable, España responsable" y enarbolaron banderas de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), además de pancartas exigiendo el derribo del muro marroquí.