Las tropas británicas desplegadas en Irak comenzaron ayer su retirada de la ciudad de Basora, en el sur del país, donde mantienen su base militar desde la ocupación del páis árabe en marzo de 2003, informaron fuentes policiales iraquíes.

Las fuentes explicaron que el inicio de la retirada se celebró en un acto en el aeropuerto internacional de Basora, donde las tropas británicas entregaron su posición a un comandante estadounidense.

Unos 200 militares británicos, que constituyen el primer grupo de los 4.100 uniformados que se encuentran en Irak, regresarán al Reino Unido. La retirada de las tropas británicas, que se producirá de manera gradual, culminará a finales del próximo mes de julio.

En la actualidad, el Reino Unido mantiene a unos 4.100 militares confinados en esta base, a unos 20 kilómetros al oeste de Basora, la mayor ciudad del sur de Irak, tras ceder el control de la seguridad de la provincia del mismo nombre a las fuerzas iraquíes el año pasado.

El Reino Unido aprobó el envío de 45.000 efectivos para participar en la invasión militar encabezada por EEUU contra Irak, que condujo al derrocamiento del ex presidente iraquí, Sadam Husein.

Desde la llegada de las fuerzas británicas a Irak a finales de marzo del 2003, han muerto 177 uniformados de este país.

Ataque suicida

Por otra parte, siete personas, entre ellas varios policías, murieron y varias decenas más resultaron heridas ayer en Mosul cuando un suicida empotró un camión cargado de explosivos contra una comisaría, según fuentes policiales.

A primera hora de la mañana, el suicida condujo el vehículo contra el edificio de la policía, situado en el área sudoeste de esta ciudad suní, en una zona llamada Mahat.

Entre las víctimas se encuentran cuatro policías y decenas de heridos, algunos de ellos muy graves, según las fuentes.

Además, varias casas de los alrededores resultaron destruidas a causa de la potente explosión y los equipos de rescate aún buscan supervivientes entre los escombros y los edificios que se colapsaron.

Mosul, a 400 kilómetros de Bagdad al norte del país, es la tercera ciudad en importancia de la capital y de Basora, en el sur.

A pesar de la intensa represión llevada a cabo en el último año, sigue siendo un feudo de terroristas de Al Qaeda.