Una antigua ejecutiva de la prestigiosa firma de joyería Tiffany & Co ha sido condenada a un año y un día de cárcel por el robo paulatino de 165 joyas de la empresa para la que trabajaba, valoradas en 1,3 millones de dólares, informó la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York.

Ingrid Lederhaas-Okun, ex vicepresidenta del departamento de desarrollo de productos de Tiffany''s, fue detenida en julio pasado en su vivienda de Darien (en el estado de Connecticut) y declarada culpable poco días después, pero estaba pendiente de sentencia, que fue hoy dictada por el juez federal Paul G. Gardephe.

Lederhaas-Okun, de 46 años, abusó de su posición dentro de la famosa sede de la marca en la Quinta Avenida de Nueva York para llevarse más de 165 joyas valoradas en más de 1,3 millones de dólares, incluidos brazaletes, anillos y pendientes de diamantes y aretes de oro y platino.

La mayor parte de esas joyas eran vendidas después en transacciones que cerraba ella misma o a través de un amigo que trabajaba en su nombre, y las cobraba directamente ella o a través de su esposo, según la Fiscalía.

"Ingrid Lederhaas-Okun pasó de vicepresidenta de una joyería a ladrona de joyas y abusó de su acceso a las piedras preciosas para robarlas y venderlas después por más de un millón de dólares", dijo el fiscal federal Preet Bahrara al anunciar su detención.

Entre 2010 y 2012, Lederhaas-Okun tuvo un sueldo anual en Tiffany''s de 360.000 dólares, y el juez de la fiscalía definió el caso como "un delito que no fue cometido bajo impulso, sino que la acusada tomó malas decisiones durante muchos años".

Los diamantes han sido desde siempre el buque insignia de la firma estadounidense, aunque su importancia fue definitivamente inmortalizada en el cine de la mano de Audrey Hepburn en la mítica película "Breakfast at Tiffany''s" (Desayuno con diamantes).