El príncipe Felipe de Edimburgo, cuyas meteduras de pata son famosas, volvió a cometer otra en su primer encuentro con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, según informó ayer The Independent. Cuando el matrimonio Obama se entrevistaba con Isabel II, el esposo de la soberana intervino para decirles a sus invitados: "¡Seguro que les cuesta mantenerse despiertos!".