Empiezo esta nueva sección con gran ilusión -saldrá publicada generalmente los jueves- , esperando cubrir un hueco que es vital e importantísimo para el buen servicio a realizar en Hostelería en todas sus facetas y distintos establecimientos. Para que me conozcan mejor, me considero sobre todo camarero, que, para mí, es un gran orgullo y una actividad que me ha aportado grandes satisfacciones, ganar sustento y, sobre todo, vivir la profesión y disfrutar de ella. En mi tesoro personal, poder haber dado clase durante veinte años a unos mil alumnos y haber colaborado con organismos oficiales, asociaciones, empresas, particulares… me hace sentir que todo ello no lo cambiaría por nada. Es cierto que el porcentaje de alumnos que realmente se dedican y disfrutan de su profesión no es alto, pero, también extrapolando a otra profesiones, tampoco es muy halagüeño el mercado de trabajo. Es necesario formarse, conocer las antiguas y nuevas técnicas. Cada negocio requiere de un servicio adaptado y profesional, también que sea actual, práctico y rentable. Tiene que gustar, sin duda, pero siempre encontraremos un puesto en el que encajemos y podamos desarrollar perfectamente la labor. Hay servicios para todos los gustos, horarios, tipos de empresas, tipos de jefes, se libra los fines de semana, solo se trabaja los festivos… Todo debe encajarse y para ello debe existir un respeto mutuo, remuneración digna (cuanto más, mejor). Pensar que cuanto más gane nuestro jefe o empresario, más ganaremos nosotros. Ahora, ni antes, no están los tiempos para que regalen nada, pero si el personal de sala se hace valer, realiza un buen servicio, todo lo demás llega. Es realizar un servicio a los demás a cambio de una retribución, similar a otras profesiones y negocios, con la particularidad de que es un campo muy amplio, donde es necesario hacerlo muy bien para que repercuta en una hostelería de calidad y todo lo que eso comporta. En cocina se ha llegado a un nivel excelente y lo mismo debe ocurrir en el servicio. Estamos "condenados" a entendernos y a trabajar conjuntamente. Un buen servicio puede arreglar una cocina no tan buena o viceversa. No quiero ponerme muy profundo el primer día y les animo a realizar un servicio excelente y disfrutar de ello.

Profesor de Hostelería