La Bolsa de Seúl cerró hoy mixta y su índice de referencia cosechó pérdidas debido a la incertidumbre en torno al futuro de Samsung tras la condena a cinco años de prisión por corrupción al heredero del conglomerado, el mayor del país asiático.

El indicador de referencia Kospi del mercado surcoreano cerró con un retroceso de 8,21 puntos, un 0,35 %, y quedó en 2.370,30 puntos en una sesión en la que se movieron 3,94 billones de wones (2.945 millones de euros).

En cambio, el índice de valores tecnológicos Kosdaq avanzó 2,65 puntos, un 0,41 por ciento, hasta 652,92 unidades

La condena el pasado viernes al heredero y líder de facto del grupo Samsung por soborno, malversación y otros delitos ha dejado sin liderazgo al mayor "chaebol" (grandes conglomerados surcoreanos controlados por clanes familiares) y despertado incertidumbre sobre el futuro del conglomerado, afectando la cotización de sus filiales.

Samsung Electronics, el mayor fabricante de telefónos inteligentes o "smartphones" del mundo, se dejó hoy un 1,96 %, mientras que su filial de construcción Samsung C&T se desplomó un 3,37 %.

También influyó hoy negativamente la fortaleza de la divisa local, el won, frente al dólar, que llevó a los inversores extranjeros a recoger ganancias por temor a que los exportadores locales se vean perjudicados por esta tendencia.

Las acciones del fabricante de chips SK hynix cayeron un 0,73 % y la mayor acería de Corea del Sur, POSCO, cerró sin cambios.

También el mayor fabricante de vehículos surcoreano, Hyundai Motor, terminó la jornada en tablas, mientras que su filial Kia Motors perdió un 0,43 %.

En contra de la tendencia general se encontraron la principal empresa química del país asiático, LG Chem, y la compañía cosmética AmorePacific, que escalaron un 0,27 % y un 1,55 %, respectivamente.

La moneda local, el won, ganó 8,6 unidades frente al dólar, que se intercambiaba en los 1.119,90 wones al cierre de la sesión.