Los accionistas del Banco Commonwealth de Australia sopesan demandar a la institución tras la caída del precio de las acciones por el escándalo vinculado al uso de sus máquinas inteligentes para lavar dinero.

"Los 800.000 accionistas registrados del CBA (siglas en inglés del banco) sufrieron una caída significativa en el precio de las acciones debido a la noticia de que la agencia australiana de inteligencia financiera (AUSTRAC) iniciara un proceso legal", según un comunicado de la firma legal Maurice Blackburn.

A principios de mes AUSTRAC demandó al Banco Commonwealth por considerar que incumplió la ley contra el lavado del dinero y la financiación del terrorismo en unas 53.700 transacciones entre noviembre de 2012 y septiembre de 2015, que ascenderían a unos 495 millones de dólares estadounidense o 418 millones de euros.

Según la demanda civil de AUSTRAC, el Commonwealth Bank permitía que en sus dispositivos de depósitos inteligentes se transfiera, en cheque o efectivo, cantidades de hasta 20.000 dólares australianos (15.800 USD o 13.400 EUR) sin límite de operaciones al día.

Maurice Blackburn, que pretende presentar el caso con el apoyo del fondo de litigios IMF Bentham, busca una indemnización a favor de los accionistas.

Según la firma, la noticia de la demanda provocó que las acciones cayeran del precio máximo intra-día de 84,69 dólares locales (84,69 USD o 56,82 EUR) a un precio de apertura de 80,11 dólares australianos (63,19 USD o 53,75 EUR).

Andrew Watson, jefe nacional de las demandas conjuntas de la firma legal, remarcó que las investigaciones y análisis de su equipo muestran que la caída del precio por título está vinculada a la noticia de las pesquisas.

Este mes también la Comisión Australiana de Valores e Inversiones confirmó que investigará al CBA, que en medio del escándalo anunció recientemente que aumentó de su beneficio neto de 7,6 por ciento en el año fiscal de 2016-2017.