El ministro italiano de Economía, Pier Carlo Padoan, descartó hoy otros "focos de crisis" en el sector bancario, tras el rescate y el plan de reestructuración de Banca Monte dei Paschi di Siena (MPS) y la liquidación de los bancos vénetos.
"No hay otros focos de crisis como los resueltos en estos días", dijo Padoan entrevistado por la radio pública RAI, para después apuntar que MPS ha sido "encarrilada" con el rescate público y el plan de reestructuración aprobados por la Comisión Europea.
Recomendó el ministro al resto de bancas "comenzar a acelerar los créditos a la economía", así como liberarse "más rápidamente que en el pasado" de los créditos morosos que acumulan, que el Banco de Italia cifró en 187.447 millones a fecha de marzo de 2017.
Sus palabras se producen un día después de que MPS anunciara su estrategia para reforzar su patrimonio y garantizar su continuidad, recortando entre 2017 y 2021 un total de 5.500 empleos, cerrando 600 sucursales y cediendo sus 28.000 millones de euros de créditos morosos.
Paralelamente el Estado procederá a su recapitalización cautelar en orden con las normas comunitarias inyectando 5.400 millones de euros, aumentando así su participación en la entidad del 4,02 % actual al 70 % durante los próximos cinco años.
Por otro lado, el pasado 26 de junio las autoridades italianas iniciaron formalmente la liquidación ordenada de Banca Popolare di Vicenza y de Veneto Banca, cuya parte "sana" ha sido comprada por Intesa Sanpaolo a cambio de un simbólico euro.
El Gobierno aprobó un decretó con el que destinará 4.785 millones de euros para mantener la capitalización de este último e importante banco italiano tras la compra de los bancos vénetos, aunque podrán movilizarse hasta 17.000 millones.
Esta operación protege a los titulares de depósitos y los poseedores de obligaciones sénior, pero no a los accionistas, que han perdido su inversión en las dos entidades, y ha sido muy criticada por la inversión de dinero público que ha supuesto.
Por esta razón, Padoan consideró en declaraciones a la RAI que "si hay administradores irresponsables deben ser perseguidos legalmente" y abogó por "proporcionar a los ahorradores, sobre todo a las familias, mucha más información que antes".
"Esto se puede hacer y se hará, incluso con el apoyo público, con iniciativas relativas a la educación financiera", defendió el ministro, para quien "no hay razón para dudar de que las autoridades de control hayan desarrollado plenamente sus funciones".