Los primeros imputados por el escándalo de las tarjetas opacas han llegado ya a la Audiencia Nacional para declarar como imputados ante el juez Fernando Andreu en mitad de los insultos y abucheos de una veintena de preferentistas, que les esperaban desde primera hora de la mañana.

El primero en entrar en el tribunal ha sido el exvicepresidente de Caja Madrid José Antonio Moral Santín, al que han proferido gritos como "ladrón", "golfo", y "han arruinado a miles de familias esta panda de mangantes" antes de entrar en la sala de vistas donde Andreu ha comenzado a interrogarle a las 9.10 horas.

Con menos presencia policial que en otras ocasiones, los afectados por las preferentes, que portan carteles en los que se puede leer "estafa bien preparada y consentida por los grandes partidos" o "Justicia ya", permanecen en los alrededores de la Audiencia controlados por decenas de agentes.

Tras Moral Santín, que fue consejero a propuesta de IU y que gastó 456.552 euros, el juez interrogará al exalcalde socialista de Móstoles José María Arteta, que cargó 137.617 euros, y los sindicalistas de CCOO Juan José Azcona, Pedro Bedia y Rodolfo Benito, que disfrutaron de 99.300, 78.200 y 140.600 euros, respectivamente.

Después será el turno del expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán, que llegará desde la madrileña cárcel de Soto del Real y que desembolsó 93.984 euros; el socialista Ramón Espinar (173.999) y Guillermo Ricardo Marcos Guerrero (de Unipyme, y que gastó 130.947 euros).

Por último, hoy están citados el miembro de UGT Gonzalo Martín Pascual (129.700) e Ignacio de Navasqües, representante de la Confederación de Cuadros y Profesionales, que cargó 191.981 euros.