El jefe del Gobierno cántabro, Ignacio Diego, ha afirmado hoy que el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, que murió el martes de un infarto, "ha sido un ejemplo" que espera que toda la región "sepa seguir".

El presidente de Cantabria y todos los consejeros de su Gobierno han acudido a la capilla ardiente de Emilio Botín, instalada en la casa-palacio de "El Promontorio", en Santander, junto al delegado del Gobierno, Samuel Ruiz.

También han acudido los responsables de la Policía Nacional y la Guardia Civil en la región, Ángel Riesco y Juan Airas.

En declaraciones a los periodistas a la salida, Diego ha subrayado que Cantabria "ha perdido un cántabro universal", por lo que su Gobierno se ha acercado "a expresar a la familia su respeto, su pesar y su condolencia".

Y, según ha apuntado, también quieren manifestar un "profundo agradecimiento" por su "compromiso" con esta comunidad autónoma, "demostrado a través de múltiples momentos y múltiples acciones que dejarán huella".

"Emilio Botín era un cántabro universal, comprometido con su tierra, y además ha sido un ejemplo que espero que toda Cantabria sepa seguir en el sentido de que nos ha demostrado que al éxito se llega con el esfuerzo, con el trabajo con el sacrificio y sobre todo con el sentido de la innovación", ha recalcado el presidente regional.

Al ser preguntado por los periodistas, Diego ha comentado que la familia está "pasando un durísimo momento", que además, por lo "inesperado", se ha hecho "todavía más duro".

También ha considerado, tras ser preguntado, que la hija de Emilio Botín, Ana Patricia, está "sobradamente cualificada" para asumir la presidencia del Banco Santander.