España espera que la Comisión Europea (CE) y Marruecos cierren "rápidamente" un acuerdo pesquero que mejore las licencias y las condiciones técnicas para los barcos españoles respecto al convenio anterior, según ha declarado hoy el secretario general de Pesca, Carlos Domínguez.

Domínguez ha aludido, en una entrevista en el Canal 24 horas de TVE, a las negociaciones que retomarán la UE y Marruecos los próximos 8 y 9 de noviembre para tratar de alcanzar un compromiso pesquero, pues el último se interrumpió el pasado mes de diciembre, lo que afectó a barcos andaluces y canarios.

España pedirá "básicamente" que sigan igual las condiciones que había en el protocolo anterior, así como ciertas mejoras técnicas, según ha subrayado Domínguez.

Ha recordado que unos 80 barcos españoles se vieron afectados por la interrupción del anterior convenio, que les obligó a abandonar el caladero marroquí.

Ha indicado que el pacto de la UE con Marruecos y el de Mauritania son los más importantes en materia de pesca.

En el caso de Mauritania, ha remarcado que las condiciones del actual protocolo han frenado la actividad de 46 barcos españoles.

Domínguez se ha pronunciado también sobre el acuerdo alcanzado esta semana por los ministros de Pesca de la UE sobre el Fondo Europeo Marítimo y Pesquero, que mantiene ayudas como las pagadas por paradas temporales de la flota.

También prevé la continuidad de las subvenciones al desguace y a la modernización de buques.

Domínguez ha valorado el compromiso europeo y que las condiciones del futuro fondo permiten a los barcos españoles afrontar la reforma de la Política Pesquera Comunitaria (PPC) que en paralelo discute la UE.

También ha calificado como positivas las primas a la "modernización", que pueden servir para "reconvertir" los motores de las embarcaciones, emitir menos dióxido de carbono o mejorar la "higiene" a bordo.

El Gobierno espera que el acuerdo de los ministros de la UE se haga definitivo, con el respaldo del Parlamento Europeo.

Preguntado por los descartes (capturas no deseadas de peces que después, muertos o moribundos, son arrojados al mar) y por la campaña Niunpezporlaborda.org, que pretende acabar con ese problema, Domínguez ha resaltado que el Gobierno comparte "la filosofía" de que todo lo que se pesque llegue a puerto.

Sin embargo, ha considerado que en dicha campaña hay algunos "equívocos" para llamar la atención del público, como el ejemplo mostrado por un famoso chef sobre un descarte de caballa.

En ese punto, Domínguez ha señalado que "en los puertos del Cantábrico o del Golfo de Cádiz" los pescadores mantendrían la caballa a bordo.

No obstante, ha recalcado que el principal origen de los descartes es la normativa de la UE, que limita la pesca por cuotas repartidas por países e impide llevar a puerto todo lo que se extrae.

Eso genera, ha añadido, que cuando hay pesquerías mixtas (varias especies) un barco "iza la red" y puede suceder que extraiga varios tipos de pescado, algunos con el cupo agotado y otros no, por lo que el Gobierno cree que hay "margen de mejora".

Como ejemplo positivo, ha citado una experiencia de éxito promovida por la patronal española de armadores Cepesca, con una especie llamada de pescado llamado "marujito", que antes se descartaba y ahora tiene un "nicho de mercado".

Domínguez ha recalcado que la pesca es uno de los pocos sectores con crecimiento y aportación de empleo en las regiones, y de una forma muy particular en Galicia.