Ángel Chinea, director de la Escuela Universitaria de Ciencias Empresariales de La Laguna, debe mostrarse muy satisfecho tras el solemne acto de graduación de la XXXVIII Promoción de Diplomados, celebrado en el Auditorio Adán Martín.

Y este estado de ánimo es producto de la impecable organización y estilo con el que transcurrió dicho encuentro donde resultó pragmático el comportamiento de los ciento cincuenta graduados que, con plausible precisión y con una notable puesta en escena, dieron amplia apertura a la amenidad y a la sobriedad, a pesar de lo denso que resultaba el programa a desarrollar en tan adecuado marco, donde familiares y amigos de los homenajeados ocuparon la totalidad de los asientos disponibles.

Resultaron muy alentadoras y oportunas las palabras pronunciadas por el rector de la Universidad de la Laguna, Eduardo Doménech, que les infundió optimismo y entereza ante la crisis que nos viene atenazando. Y tuvo un capítulo muy especial y sentido para aquellos seres que les habían impregnado consuelo, cariño y cordura en sus acciones, sus padres, para los que el citado rector pidió el aplauso de la concurrencia, que se lo brindó, con entusiasmo, de pie.

Alocuciones

Los padrinos Ricardo J. Díaz y Carmen Inés Ruiz, personajes muy apegados a los numerosos integrantes de esta XXXVIII Promoción, tuvieron, en sus entrañables alocuciones, palabras muy estimulantes y elogiosas para los familiares de los graduados, a los que consideraron como firmes puntales y vínculos que siempre estarán atentos a sus vástagos.

Insistimos: impecable la ceremonia con la entrega de la protocolaria banda, la orla y una rosa, "como símbolo de la belleza", mientras en una pantalla gigante, que presidía el salón, y con perfecta sincronización, se veía la figura del diplomado en su niñez y en la actualidad y, al unísono, la foto del recuerdo con los referidos padrinos y con la madrina de honor.

Cambios normativos

En este acto hay que destacar la intervención del decano del Ilustre Colegio Oficial de Titulados Mercantiles y Empresariales de Tenerife (Cotime), Francisco Purriños Carrasco, al señalar la disponibilidad de la citada corporación "al hacer una reserva de entre quince y veinte plazas a las que tendrían acceso estos graduados, con carácter rotatorio, y en función de la disponibilidad, para todos los cursos y actividades que se realicen durante este año, así como el acceso vía correo electrónico de manera gratuita, a la información documental actualizada que facilitamos a nuestros colegiados".

Francisco Purriños concluyó diciendo que "ustedes han elegido una de las profesiones más dinámicas; dependemos de los cambios normativos que requieren un esfuerzo de formación continuo, que posee grandes recompensas en un plano individual pero han sido mis compañeros de profesión los que me han demostrado que los frutos son mayores cuando se actúa de forma colectiva".