La debilidad del consumo en Canarias sigue lastrando las ventas del sector comercial, que no dejan de caer desde hace cuatro años, presionadas por las medidas de austeridad y los recortes, el paro, la falta de crédito y la incertidumbre.

Las dificultades de hacer caja tienen su reflejo en el descenso de un 4% del Índice de Comercio al menor (ICM) en el primer trimestre del año, así como en la incapacidad de mantener sus propias plantillas o de absorber parte de la mano de obra expulsada del mercado laboral por la crisis. De esta manera, el número desempleados al finalizar marzo se situó en 46.279 parados, 2.691 más que hace un año.

Estos son algunos de los datos que se recogen en el informe de Coyuntura del Sector Comercial para el primer trimestre de 2012, elaborado por el Servicio de Estudios Económicos de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife en colaboración con la entidad financiera CajaSiete.

Medidas perjudiciales

En el documento se analizan variables como el Índice de Comercio al por Menor (ICM), mercado de trabajo, Índice de Precios al Consumo (IPC), la confianza empresarial y la creación de nuevos negocios a través de las Ventanillas Únicas Empresariales.

Para el presidente de la Cámara de Comercio, Ignacio González Martín, el impacto que están teniendo las medidas impulsadas por las administraciones públicas para reducir el déficit están "perjudicando claramente el poder adquisitivo de los canarios y mermando su capacidad de consumo, lo que incide directamente en la viabilidad y en el mantenimiento del empleo de uno de los sectores más importantes para la economía de las Islas".