España fue el tercer país de la Unión Europea (UE), junto a Portugal, donde más subió el precio de la electricidad -un incremento del 13 %- en la segunda mitad de 2011, en comparación con el mismo periodo del año anterior.

Sólo Letonia (27 %) y Chipre (19 %) se colocaron por delante en la escalada del precio de la electricidad, mientras que Luxemburgo fue el único país que presentó una caída del precio (5 %).

En el conjunto de la Unión Europea el encarecimiento llegó al 6,3 % entre la segunda mitad de 2010 y 2011, después de la subida del 5,6 % entre la segunda mitad de 2009 y 2010.

Los precios más bajos de la electricidad fueron los de Bulgaria (8,7 euros por 100 kWh), Estonia (10,4) y Rumanía (10,9) y los más elevados, los de Dinamarca (29,8), Alemania (25,3) y Chipre (24,1).

El precio medio en la UE fue de 18,4 euros, por encima del cual se sitúa España, donde los 100 kWh se pagaron a 20,9 euros de media.

En cuanto al gas, las subidas más fuertes fueron las de Reino Unido (27 %), Luxemburgo (22 %) y Bélgica (21 %), mientras que los precios en España, Rumanía y Dinamarca permanecieron estables.

En euros, los países que menos pagaron por el gas de media fueron Rumanía (2,8 euros por 100 kWh), Estonia (4,4) y Bulgaria (4,7), y los que más, Suecia (11,7), Dinamarca (10,9) e Italia.

La media en la UE fue de 6,4 euros por 100 kWh, un nivel que España no superó (5,4 euros).