En una nueva jornada de acoso a la deuda española en los mercados, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, rechazó ayer las dudas sobre si España cumplirá con su objetivo de déficit y pidió a los ciudadanos "sacrificios" y "generosidad" porque el país está todavía "en el kilómetro cero de una larga senda reformista".

Rajoy hizo estas declaraciones en la clausura de la asamblea anual del Instituto de Empresa Familiar (IEF). "Nadie, ni gobernantes ni instituciones, dentro ni fuera de nuestro país, debe dudar, ni sembrar dudas, sobre el compromiso de España con el euro y la integración política europea", señaló el presidente antes de advertir de que "tampoco nadie puede esperar que en pocas semanas se resuelvan cuestiones tan largamente enquistadas".

Como balance de la jornada, la bolsa española bajó un 0,57% y cerró al borde de los 7.200 puntos, perjudicada por las ventas en el mercado de deuda -la rentabilidad de los bonos españoles superó el 6%- y la caída de la banca.

Tras alcanzar durante el día su máximo anual en 443 puntos, la prima de riesgo -la diferencia entre los intereses que debe pagar España por su deuda, en comparación con el bono de referencia, el alemán- acabó el día en 432 puntos básicos. En ese contexto y después de los recelos internacionales hacia España, Mariano Rajoy aseveró que "cumplirá y hará cumplir" la consolidación fiscal y explicó que el incumplimiento de 2011 ha hecho "mucho daño a la economía española y ha generado muchas dudas".

Recalcó que es consciente de los "graves problemas" que afronta estos días la economía, pero subrayó que "el escenario ha cambiado", ya que preside un Ejecutivo con "una enorme fortaleza política derivada de las pasadas elecciones" y que, además, gobierna multitud de administraciones autonómicas y locales.

Para apaciguar las dudas que reconoció Rajoy sobre España, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, explicó ayer las reformas aprobadas por el Gobierno a un amplio grupo de inversores franceses en París.

Según apuntó una portavoz del Ministerio, De Guindos se trasladará hoy a Alemania, donde tiene previsto reunirse con el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, a quien también explicará las recientes reformas financiera, laboral y fiscal. El encuentro tendrá lugar en Fráncfort y estará seguido de otra reunión con inversores en Dusseldorf.

En una entrevista concedida a El Mundo, el ministro advirtió ayer de que los ataques de los mercados contra la deuda soberana española seguirán si continúan existiendo dudas sobre el euro y el proyecto europeo.