El índice de desempleo en EEUU bajó cuatro décimas hasta el 8,6 % en noviembre, el porcentaje más bajo en dos años y medio, según las cifras del Departamento de Trabajo dadas a conocer hoy.

Pese a la buena noticia, el Gobierno reaccionó con cautela, ya que la mitad de la disminución se debe a que unas 315.000 personas abandonaron la búsqueda de empleo.

El Departamento de Trabajo indicó que el contingente de desempleados disminuyó de 13,9 millones de personas en octubre a 13,3 millones en noviembre, cuando la economía tuvo una ganancia neta de 120.000 empleos: 140.000 más en el sector privado y 20.000 menos en el sector público.

"El crecimiento del empleo en noviembre fue suficiente como para permitir que la proporción de población en edad laboral y con trabajo aumentara en una décima de punto porcentual", señaló Heidi Shierholz, del Instituto de Política Económica, un grupo independiente con sede en Washington.

"Si se mantiene este ritmo de crecimiento pasarán más de dos décadas antes de que retornemos al índice de desempleo previo a la recesión", añadió. "Además, la reducción de la fuerza laboral no es, precisamente, la manera en que desearíamos una reducción del desempleo".

Alan Krueger, el presidente del Consejo de Asesores Económicos del presidente Barack Obama, se mostró también cauto ante el informe y dijo que "si bien la economía sigue recuperándose de la peor recesión desde la Gran Depresión, el ritmo de mejora no es suficiente ante las enormes pérdidas de empleo que trajo la recesión".

Los mercados financieros, en cambio, reaccionaron con entusiasmo y el Índice Standard & Poor de 500 acciones completó su mayor arremetida semanal desde marzo de 2009. El Índice del Dow Jones y el Nasdaq añadieron ganancias por cuarto día consecutivo.

Nariman Behravesh, economista jefe de IHS, Inc, en Lexington (Massachusetts), dijo en su boletín digital que el informe del desempleo "es una buena noticia, aunque no una gran noticia".

"El mercado laboral está recuperándose gradualmente", añadió. "Yo no me haría la ilusión de que el índice de desempleo está cayendo sustancialmente, pero sí me conformo con que empiece a disminuir".

Durante la recesión entre diciembre de 2007 y julio de 2009 la economía de EEUU perdió unos 8,4 millones de empleos.

Krueger encontró un dato alentador: por veintiún meses consecutivos el sector privado ha añadido empleos, sumando 2,9 millones de puestos de trabajo.

Y señaló uno preocupante: el 43 por ciento de los 13,3 millones de personas que figuran en la estadística de desempleo ha estado sin un trabajo más de seis meses.

Durante noviembre los sectores con crecimiento del empleo incluyeron el comercio minorista, que añadió 50.000 puestos de trabajo, los servicios y negocios profesionales con una adición de 33.000, los restaurantes y hoteles con 22.000 empleos, el cuidado de la salud con 19.000 y la manufactura con 2.000.

Las agencias que proveen personal temporal añadieron empleos por quinto mes consecutivo, con una adición de 22.300 en noviembre. Los analistas consideran este sector como un indicador de la tendencia general ya que muchas empresas toman primero personal temporal antes de expandir su plantilla permanente.

En cambio la construcción perdió 12.000 puestos de trabajo, y dentro de los 20.000 empleos eliminados en el sector gubernamental, los gobiernos municipales y estatales perdieron el mes pasado 16.000 empleados y han despedido a 430.000 desde febrero de 2010.