Las empresas canarias no están sacando partido al sistema de ayudas para la formación continua de sus trabajadores, con el que pueden obtener descuentos en sus cotizaciones a la Seguridad Social para cubrir el coste total o parcial de la formación de sus plantillas. De hecho, solo el 18% de los trabajadores de las empresas privadas del Archipiélago se acogieron a este régimen de bonificaciones vinculado a la cualificación y actualización profesional a lo largo del año pasado, según se desprende del último informe de la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo, de la que la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife es entidad organizadora.

Con estos datos, las empresas canarias se sitúan en el tercer puesto por la cola en el ranquin nacional en materia de cobertura formativa bonificada, solo por delante de La Rioja y la ciudad autónoma de Melilla, según agregó ayer la institución cameral en un comunicado.

Además, en este terreno continúan siendo las grandes compañías las que más aprovechan las ventajas del sistema de descuentos por formación en las cotizaciones sociales, de forma que cerca del 90% de los negocios con más de 250 trabajadores se acogieron a la formación bonificada durante 2010, frente a tan solo el 20% de micropymes (negocios con menos de nueve trabajadores).

En este sentido, la Cámara de la provincia tinerfeña recuerda a las empresas de las Islas que todavía están a tiempo de utilizar la bolsa de descuentos para formación que tienen disponible a lo largo de este año y que si no la utilizan antes de que acabe el ejercicio, la pierden.

Para favorecer a las pymes el acceso a la formación continua de sus profesionales, el Centro de Formación de la Cámara dispone de un servicio que se encarga de tramitar a las empresas las ayudas a la formación de sus trabajadores.

El jefe de la Unidad Técnica de Formación Profesional del Centro de Formación, Javier Concepción, apunta que el coste máximo que se puede bonificar, en general, es de 13 euros por alumno y hora para los cursos presenciales catalogados como superiores y de nueve para los que tienen el carácter básico. A su vez, las empresas disponen de un Crédito Anual Formativo mínimo de 420 euros, que se calcula en base a sus cotizaciones a la Seguridad Social en concepto de Formación Profesional y de su plantilla media a lo largo del año anterior. Para Concepción, el único motivo que explica el escaso uso de este sistema de ayudas es la falta de información del empresariado local.