La Comisión Europea (CE) recomendó a Francia y Alemania que continúen con sus programas de contención del gasto con el fin de reducir sus niveles de deuda pública, a pesar de que ambos países están sufriendo un severo frenazo del crecimiento económico y del riesgo de que Europa caiga en recesión.

La CE publicó hoy un informe sobre la situación de las finanzas públicas en la eurozona en el que introduce recomendaciones a los Estados, pero no incluye a los países rescatados -Grecia, Irlanda y Portugal-, puesto que siguen programas específicos para sanear sus cuentas públicas.

Bruselas reclama a Alemania que se "asegure un esfuerzo de ajuste estructural adecuado" para cumplir "el objetivo a medio plazo" de un 0,5 % de déficit en 2012, dos años antes de lo pactado con sus socios comunitarios.

Para ello, el Gobierno alemán debe "completar la implementación de las reglas presupuestarias" para sus estados federados ("länder") y "fortalecer más el correspondiente mecanismo de control y sanción" de los ejecutivos regionales que incumplan los niveles de deuda y déficit marcados.

Sin embargo, a la vez que reclama más austeridad, la CE pide a Alemania que tome medidas que favorezcan el crecimiento, como mantener los niveles de gasto en educación y mejorar la eficiencia en el gasto correspondiente a sanidad y las prestaciones sociales a personas dependientes.

En el caso de Francia, la CE pide que corrija el déficit antes de 2013 con el objetivo de reducir la deuda y cumplir los requisitos señalados por la UE en materia presupuestaria.

Para ello, la CE cree que Francia debería tomar "medidas adicionales" y conseguir ingresos extraordinarios si fuese necesario.

Además, el Ejecutivo europeo reclama al Gobierno galo "incrementar la eficiencia del sistema impositivo" con reducciones de los costes de las exenciones fiscales y de la seguridad social, así como una menor dependencia en impuestos sobre las rentas del trabajo para aumentar las tasas medioambientales y sobre el consumo, en el segundo caso una medida de carácter claramente regresivo.

Según las estimaciones de Eurostat, la agencia europea de estadística, para el segundo trimestre de este año, Francia está estancada con un crecimiento del 0,0 % y Alemania creció un pobre 0,1 % respecto al primer trimestre de 2011.

Analistas y voces reconocidas dentro del mundo de la finanzas, como la de la directora-gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, advirtieron de que la UE puede recaer en una recesión a causa de la brusca ralentización de los dos mayores países de la zona euro.

En el caso de Italia, otro de los Estados comunitarios en el punto de mira de los mercados, la CE recomienda que el Estado introduzca límites obligatorios al déficit para cumplir los objetivos pactados con sus socios comunitarios con el fin de reducir la elevada deuda pública.

Como medidas adicionales, Bruselas reclama un mayor control sobre el gasto de todos los niveles de la administración y políticas para favorecer el trabajo femenino, hecho que reportaría ingresos adicionales a las arcas públicas italianas.