El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, advirtió hoy de que la próxima semana ha de estar lista la reforma de la negociación colectiva, pues lo referente a las mutuas y al absentismo irá incluido como enmienda al proyecto de ley de reforma de las pensiones y para ello el plazo vence el 6 de junio.

De esta forma, el Gobierno podría aprobar la reforma del sistema de convenios en el Consejo de Ministros del viernes 3 de junio.

"No creo que sea posible alargarlo mucho más (la aprobación de la norma)", aseguró Gómez en declaraciones a los medios antes de presentar un seminario sobre empleo organizado por la Fundación Ortega-Marañón.

"Debe terminar la semana próxima y no habrá más tiempo, porque finaliza el plazo de enmiendas a la reforma de las pensiones", insistió el ministro, que se mostró optimista con la posibilidad de que sindicatos y patronal finalicen el proceso negociador "con éxito" en el mencionado plazo.

En referencia a las conversaciones entre sindicatos y patronal el ministro precisó que se trata de una negociación que contiene tres "paquetes", la reforma del título tercero, es decir, de los convenios colectivos; las mutuas de accidentes de trabajo y el absentismo, y la contratación, especialmente centrada en el empleo juvenil.

Según Gómez, a falta de desarrollar la cuestión de la contratación, en los otros dos puntos, los avances "son finales" a pesar de que puede haber algún detalle "poco significativo" por discutir.

"Estamos pendientes esencialmente de redactar el texto del articulado", indicó el ministro, aunque quedan los asuntos vinculados a la contratación laboral "pensando básicamente" en un programa especifico de empleo juvenil, así como de un mayor uso de la mejora del contrato en prácticas.

La negociación está en su fase final, reiteró Gómez, quien señaló que el nivel de acuerdo dentro de la CEOE es importante como para dar por finalizado el proceso con éxito.

Respecto al contrato único con un despido de 20 días por año trabajado para las nuevas contrataciones como pide la CEOE, Gómez consideró que incorporar a estas alturas esa cuestión alargaría el proceso de negociación durante meses porque es un "cambio sustancial"

A su juicio, las prioridades "son otras" y ahora de lo que se trata es de impulsar el empleo juvenil.

En cuanto a si el contrato formativo se aplicará hasta los 35 años, Gómez dijo que la discusión no versa sobre los cambios en el contrato sino de articular un modelo del sistema que combina de intercambio entre trabajo y formación profesional distinto del actual.

En este sentido, dijo que el sistema alemán serviría de guía para configurarlo.

El ministro reiteró que en caso de que no haya acuerdo el Gobierno legislará y hará una reforma que contemple la flexibilidad interna y la protección del trabajador, con mecanismos de arbitraje para cuando acabe la vigencia de los convenios y que "desjudicialice" los procesos.

"No estamos pensando en legislar", subrayó Gómez, pero en caso de hacerlo dijo que el Gobierno lo haría "al menos en el artículo tercero, el ámbito de los convenios colectivos" porque ese es el "compromiso".

Para el resto de las materias, señaló que surgen de la negociación y "el Gobierno no adquiere ningún compromiso en caso de no llegar a acuerdos".

Sobre los salarios, contemplará un equilibrio entre la productividad y los precios.