El Banco de España aprobó ayer los planes presentados por las trece entidades que necesitan aumentar su capital para cumplir con los nuevos requisitos fijados por el Real Decreto-ley 2/2011. De entrada, como ya se avanzó, la Caja del Mediterráneo (CAM) ha pedido al Estado 2.800 millones y cuatro fusiones (NovacaixaGalicia, CatalunyaCaixa, Unnim y Caja España-Duero) plantean, también como primera opción, solicitar ayudas al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

No obstante, ello significa que finalmente el Estado inyecte todo el capital que requieren para cumplir con los nuevos criterios de solvencia, ya que, por ejemplo, si Caja España-Duero cerrara su unión con Unicaja, no requeriría ninguna ayuda del FROB.

En un comunicado, el supervisor explica que las cuatro alianzas bajo un Sistema Institucional de Protección (SIP) solo recurrirían a una inyección del Estado en última instancia, si no lograra salir a bolsa o encontrarán un inversor significativo. Esto confirma que Bankia (el grupo de siete cajas que lideran Caja Madrid y Bancaja), Banca Cívica (Caja Navarra, Caja Burgos, CajaCanarias y Cajasol), Banco Mare Nostrum (cajas de Murcia, Penedés, Sa Nostra y Granada) y el nuevo SIP de Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria (creado tras el fracaso de Banco Base, proyecto en que participaba también la CAM) han elegido como primera fórmula de capitalización su salida a bolsa o la colocación de al menos un 20% de su capital en inversores privados.

En el caso de la nueva alianza liderada por Cajastur, el supervisor añade que requeriría 519 millones de euros siempre que no coloque a un inversor privado una participación significativa de su capital.

A partir de ahora y antes del próximo 28 de abril, las entidades que plantean la opción de recibir una inyección del Estado tendrán que aprobar en sus consejos de administración un plan más concreto, que el Banco de España estudiará y en el caso de aprobarlo, lo remitirá al Ministerio de Economía y la Comisión Europea.

Estas dos instituciones serán, en última instancia, las que autoricen la inyección de dinero público a través del FROB.

El Banco de España precisa en su nota de prensa que los cuatro bancos (Barclays, Bankinter, Deutsche Bank y Bankpyme) que no cumplían con los nuevos criterios de solvencia han anunciado que ampliarán capital o emitirán bonos convertibles en acciones para lograrlo.

El supervisor español cifró el pasado 10 de marzo las necesidades de capital del sector financiero español en 15.157 millones de euros, de los que 14.077 millones (93%) corresponden a las nueve cajas de ahorros, y el resto, a los cuatro bancos.