Telefónica no deja de sorprender cada día. Si este jueves anunciaba que estudiaba un recorte del 20 por ciento de la plantilla en España, este viernes la empresa comunicó otras dos noticias inesperadas. Pasada la medianoche, la compañía envió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores la convocatoria de su próxima junta de accionistas, a celebrar el 18 de mayo, en la que propone que se aprueben incentivos millonarios para premiar a sus directivos en los próximos años. Y algo más tarde, propuso también el pago de un dividendo de 0,75 euros por acción para el 6 de mayo y de 0,77 euros en el segundo semestre, lo que equivale a algo más de 6.900 millones en total. Tras el anuncio de la junta, además, Telefónica publicó el Informe Anual de Gobierno Corporativo del ejercicio 2010. En él, se recoge que la remuneración agregada de los consejeros de la compañía del pasado año fue de 21,7 millones de euros, más otros 5,9 millones por su participación en otros consejos de administración de sociedades del grupo.

Telefónica propone grandes bonus pese al recorte de plantilla. La empresa presidida por Cesar Alierta ha lanzado una propuesta que beneficiará con incentivos millonarios a casi 2.000 de sus directivos. La noticia salta justo después de otro anuncio, el de que en tres años la compañía reducirá la plantilla española un 20 por ciento, afectando a 5.600 trabajadores. Este recorte afectará fundamentalmente a la telefonía fija y se realizará con externalizaciones y reestructuración de plantilla.

La compañía prevé incentivar a sus directivos y empleados mediante el establecimiento de dos planes de incentivos a largo plazo. Consisten en la entrega de acciones de la compañía en concepto de retribución variable. La compañía pretende aprobar en su próxima Junta de Accionistas, que se celebrará el 17 de mayo, un plan dirigido en exclusiva al equipo directivo por el que cerca de 1.900 dirigentes recibirían un máximo de 450 millones de euros en cinco años.

En este plan, de menor cuantía que el aprobado en 2006 por un importe máximo de 754 millones de euros y siete años de duración, el número de acciones a percibir se calculará en función del ''Total Shareholder Return'' (TSR). Es decir, a partir de la suma de evolución de la acción de Telefónica más los dividendos durante cada ciclo, comparado con la evolución de las acciones de las principales compañías de telecomunicaciones que integran el índice Dow Jones Global Sector Titans Telecommunications.

De acuerdo con el Performance & Investment Plan (PIP), estos directivos recibirían un máximo de 450 millones de euros en acciones en cinco años distribuidos en tres ciclos de tres años de duración cada uno, hasta 2014, 2015 y 2016, respectivamente.

Así, en el primero de estos ciclos, el número máximo posible de acciones a recibir por los consejero ejecutivos es de 390.496 acciones para el presidente, César Alierta; de 234.298 acciones para el consejero delegado, Julio Linares, y de 124.249 acciones para el máximo responsable de Telefónica en Latinoamérica, José María Álvarez Pallete. La retribución de estos tres directivos ascendió en 2010 a 14,54 millones de euros, cantidad superior a los 14,005 millones que cobraron en 2009.

PLANES PARA EMPLEADOS

Por otro lado, la empresa de telecomunicaciones propuso un plan restringido de incentivos a largo plazo destinado a los empleados y al personal directivo ligado a la permanencia en la compañía, con un máximo de unos 50 millones de euros. Los destinatarios de este plan serán los empleados y personal directivo del grupo que cumplan los requisitos de "idoneidad" y que sean invitados de "forma expresa" a participar en el mismo.

Asimismo, Telefónica anunció un plan global de compra incentivada para la totalidad de los empleados del grupo y se compromete a entregar gratuitamente a los destinatarios que se adhieran al plan un número de acciones adicionales. El plan tendrá una duración mínima de dos años y máxima de cuatro con un importe asignado al mismo no superior a los 65 millones de euros.

Por otro lado, se someterá a aprobación en la próxima junta el reparto de un dividendo de 0,77 euros por acción con cargo a reservas de libre disposición en el segundo semestre de 2011. Este dividendo se suma al aprobado para el próximo día 6 de mayo por una cuantía de 0,75 euros por título a cuenta de los beneficios de 2011.

Además, el consejo de Telefónica propondrá a la junta de accionista la aprobación del nombramiento del presidente de China Unicom, Chang Xiaobing, como consejero de la compañía por un periodo de cinco años. Telefónica mantiene una participación en su socio asiático China Unicom del 9,7 por ciento del capital, mientras que China Unicom controla el 1,37 por ciento de la operadora española.

Tras el anuncio de la junta, además, Telefónica ha publicado esta mañana el Informe Anual de Gobierno Corporativo del ejercicio 2010. En él, se recoge que la remuneración agregada de los consejeros de la compañía del pasado año fue de 21,7 millones de euros más otros 5,9 millones por su participación en otros consejos de administración de sociedades del grupo.

Telefónica es la única de las cinco mayores empresas cotizadas españolas que no publica el sueldo de su presidente ni lo somete a la votación de los accionistas. La empresa cree que "su votación podría derivar en un debate abierto en cada junta, generando por tanto inestabilidad e incertidumbre", según ha comunicado hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

ZAPATERO NO HABLA DEL RECORTE DE PLANTILLA

José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno, evitó pronunciarse sobre el plan de recorte de empleo de Telefónica. No obstante, eludió pronunciarse al respecto "hasta conocer los detalles" porque no quiere "dar opiniones sin fundamento". Su ''número dos'' no eludió el tema. Alfredo Pérez Rubalcaba, vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, afirmó de forma contundente que no está "de acuerdo"... "Más claro no puede ser".

Cayo Lara, coordinador general de Izquierda Unida (IU), dio un paso más y se preguntó si debería ser "delito" que empresas con beneficios despidan a trabajadores. "Telefónica ganó el pasado año más de 10.000 millones de euros y va a destinar 600 millones de euros a despedir a trabajadores. En concreto, en España, quiere despedir a un 20 por ciento de la plantilla, que son más de 5.600 trabajadores".

La suma de "beneficios y despidos de trabajadores es inconcebible e incomprensible". Ésta es, para Lara, "la nueva cara del sistema capitalista de producción: cuando las empresas pierden recursos, despiden a los trabajadores porque hay pérdidas, y cuando las empresas tienen beneficios, despiden a trabajadores porque son insaciables y porque quieren seguir ganando más y más".

El izquierdista sentenció, refiriéndose a Telefónica: "Espero que algún día sea una empresa que pueda volver a ser gestionada directamente por lo público".