La multinacional Telefónica informó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de que mantiene su compromiso de repartir a partir de 2012 un dividendo mínimo de 1,75 euros por acción y de que remunerará anualmente a sus accionistas con al menos esa cantidad desde entonces.

Telefónica explicó, en un comunicado, que la forma de remuneración, ya sea a través de dividendos, recompra de acciones o combinación de ambas, se decidirá teniendo en cuenta "las circunstancias y preferencias de los inversores en ese momento".

La firma presidida por César Alierta, que aprobó recientemente el reparto de 1,60 euros por acción para este ejercicio, lo que supone un aumento del 14,3% respecto al dividendo de 2010, señaló que su intención es mantener la práctica anual de fraccionar el pago de dicho dividendo en dos tramos.

En la nota remitida al órgano regulador antes de dar comienzo en Londres las jornadas del "Día del Inversor", que reunió a cerca de 300 analistas e inversores, la compañía resaltó que la remuneración al accionista no será pagada con deuda.

Asimismo, anunció el objetivo de incrementar entre un 1% y un 4% anual sus ingresos durante el periodo de 2010 a 2013, desde los 63.144 millones de euros obtenidos en 2010, así como de alcanzar un margen de resultado (Oibda) en el rango alto del 30% y unas inversiones acumuladas de hasta 27.000 millones de 2011 a 2013, desde los 8.541 millones de euros de 2010.

En cuanto a las previsiones para el presente ejercicio, el grupo anunció en la presentación de resultados anuales que espera un crecimiento de los ingresos de hasta un 2% en 2011.