Portugal, que vive un momento de gran debilidad y enorme presión financiera, colocó hoy 1.005 millones de euros a seis y doce meses a unos intereses del 5,11 % y del 5,90 %, respectivamente, más altos que el 2,98 % y 4,33 % registrados en las últimas emisiones del mismo tipo.

El Tesoro luso informó también de que la demanda fue 2,3 veces superior a la oferta en el plazo más corto, en el que se vendieron 550 millones de euros, y 2,6 en el más largo, que colocó 455 millones.

La subasta se produce cuando la creciente incertidumbre política, económica y presupuestaria que vive Portugal sitúan al país a las puertas de la necesidad de un rescate financiero debido a su dificultad para acceder a los mercados.

La penalización de la deuda portuguesa a cinco años se sitúa por encima del 10 % de interés y la de diez años se negocia en el 8,767 %.

Los analistas financieros consideraron significativo el incremento de las tasas de interés en el plazo a seis meses, que han pasado desde el 11 de marzo del 2,98 % al 5,11 % de hoy.

En la última emisión del Tesoro, el pasado 1 de abril, Portugal emitió 1.645 millones de euros a quince meses de plazo a un interés del 5,79 %, menor del desembolsado en el mercado secundario (6,4 %).

La presión sobre Portugal se ha intensificado por la reciente decisión de las principales agencias de notación financiera de rebajar la calificación del país luso y de sus principales bancos.

La dimisión del primer ministro socialista, José Sócrates, el pasado 23 de marzo a causa del rechazo en el Parlamento de su último plan de austeridad y la convocatoria para el próximo 5 de junio de comicios legislativos anticipados han debilitado la situación del país a ojos de los inversores.