El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, exigió ayer al Ejecutivo central que fije de "inmediato" en el 100% los servicios mínimos en los aeropuertos del Archipiélago mientras dure la huelga contra la privatización de Aena, que comenzará a notarse en Semana Santa.

El anuncio del Gobierno central sobre los servicios mínimos en los aeropuertos canarios ha de ser "inmediato", explicó Rivero, para contrarrestar cualquier incertidumbre de aquellas personas que ya tienen decidido viajar a Canarias en esas fechas. Y alertó de que el daño para la economía isleña de esta huelga puede ser "irreparable".

"Cualquier incertidumbre pone en riesgo los puestos de trabajo en el sector turístico, pero también cercena las expectativas de los empresarios y por tanto de futuras contrataciones", se lamentó Paulino Rivero, que insistió en el gran daño que hace a los trabajadores canarios el simple anuncio de la huelga. Rivero, que hizo estas declaraciones en Madrid, antes de viajar a Alemania para participar en la Bolsa de Turismo de Berlín (ITB), reiteró que el mero anuncio de la huelga ya perjudica al sector turístico canario, justo cuando está en fase de recuperación, por lo que demandó una decisión del Gobierno central rápida para contrarrestar ese efecto negativo.

"En la Península, el que no viaja en avión puede hacerlo en tren o en coche, pero en Canarias es vital mantener al 100% el funcionamiento de los aeropuertos", dijo Paulino Rivero Baute, quien alertó de que "se pone en riesgo la recuperación del turismo y del empleo en el Archipiélago en una época clave para este importante sector como es, de entrada, la Semana Santa".

El presidente explicó que en los próximos días las instituciones y las empresas turísticas de las Islas van a participar activamente en la ITB porque la recuperación del turismo que se está produciendo en los últimos meses no es coyuntural, pero hay que consolidarla, y a eso no ayuda en nada la posible huelga.

El Gobierno central tiene que separar las circunstancias de Canarias de las de los aeropuertos peninsulares, "debe adoptar medidas excepcionales inmediatamente, es vital", subrayó Paulino Rivero.

Ya en la pasada huelga encubierta protagonizada por controladores el pasado diciembre, Rivero mostró su malestar por las graves consecuencias ocasionadas por el citado colectivo por lo que reclamó al Gobierno central que impulsara un proyecto de ley de manera urgente para militarizar esta actividad y reclamó que se modificara el Código Penal para que se tipifique como delito el abandono del puesto de trabajo por parte de los controladores.