España se descuelga de los primeros puestos como destino turístico de calidad, según un estudio global publicado hoy por la organización internacional World Economic Forum (WEF) con motivo de la Bolsa Internacional del Turismo que se inaugura esta semana en Berlín.

España, que acumula la mayor caída de las principales potencias turísticas del mundo con respecto al estudio anterior, aparece en octava posición en el ránking del Informe de Competitividad Turística 2011 del WEC.

En primera posición destaca Suiza, que repite puesto por tercer estudio consecutivo, seguido, por este orden, Alemania (que avanza uno), Francia (que sube uno), Austria (que cae dos), Suecia (que gana dos), Estados Unidos (que avanza dos) y Reino Unido (que recorta dos).

Según este estudio, los aspectos que lastran la puntuación española son los métodos de contratación y despido de personal, los costes empresariales del terrorismo, la presión impositiva, el poder adquisitivo relativo, las dificultades para iniciar un negocio, el número de especies animales amenazadas y la baja calidad del sistema educativo.

Los puntos positivos del turismo español son, por otro lado: el fácil acceso a saneamiento y agua potable, el número de habitaciones hoteleras y cajeros, el servicio aéreo, el número de lugares de patrimonio de la humanidad naturales y culturales, y la ratificación de tratados internacionales sobre Medio Ambiente.

Los países europeos más afectados por la crisis de la deuda son los que más han empeorado en este informe con respecto al anterior, de 2009, encabezados por Grecia y Portugal.

Este estudio del WEF, realizado en colaboración con Booz & Company, ha jerarquizado la calidad del turismo en 139 países analizando un total de 60 variables que abarcan desde la legislación a la seguridad y la sanidad, pasando por las infraestructuras turísticas, la situación económica y los aspectos culturales.