Los incentivos canarios a la contratación privada contarán en 2011 con un presupuesto de 7,8 millones de euros, lo que supone una fuerte reducción respecto a los 30 millones habilitados en 2010 para este programa, cuya eficacia ha sido puesta en entredicho en varias ocasiones por sus potenciales beneficiarios, los empresarios.

La Consejería autonómica de Empleo informó ayer, a través del Boletín Oficial de Canarias (BOC), de que el plan extraordinario de ayudas a la contratación también estará vigente este año, tal y como se acordó con la patronal y los sindicatos el pasado día 17. Como en 2010, se subvencionarán los costes de Seguridad Social de cada nuevo contrato, con un porcentaje de ayuda que varía en función de la duración del mismo.

Estas subvenciones se sumarán en 2011 a los incentivos estatales a la contratación a tiempo parcial, aprobados hace semanas por el Gobierno central. El Ejecutivo canario confía en que "la acción conjunta" de ambos programas tenga "un evidente efecto de generación de empleo" en las Islas.

Según los resultados de las dos primeras fases del programa autonómico, entre abril y agosto de 2010 se concretaron cerca de 900 contratos gracias a los citados incentivos. La resolución de la tercera fase, que abarcó los convenios de trabajo celebrados a partir de septiembre, aún no han sido publicados por el Gobierno.

De todas formas, el presidente del Ejecutivo, Paulino Rivero, ha apelado varias veces a la "responsabilidad" del empresariado, al que reclama que aproveche más estas ayudas para crear puestos de trabajo. Las empresas han dicho siempre que la utilización y, por tanto, la eficacia de los incentivos está supeditada a sus necesidades productivas y, en general, a que mejore la situación económica.

En el BOC de ayer, el Gobierno isleño recalca que los motivos que avalaron la puesta en marcha de este programa "se mantienen e incluso se potencian" en 2011, ya que han mejorado algunos indicadores, en especial del turismo.