Tras una mañana de moderados ascensos, Wall Street volvía hoy al terreno negativo hacia la media sesión y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, se dejaba el 0,67% influido por el descenso de las ventas de casas nuevas en Estados Unidos el mes pasado y la crisis en Libia.

Ese índice, la principal referencia de la Bolsa de Nueva York, restaba 81,40 puntos para colocarse en 12.024,38 unidades, el selectivo S&P 500 cedía el 0,56% (-7,34 unidades) hasta 1.300,06, y el índice compuesto del mercado Nasdaq se dejaba el 0,13% (-3,58 puntos) hasta 2.719,41.

El parqué neoyorquino no pudo mantener los leves descensos que había logrado registrar en la mañana, que habían llegado influidos por el dato de las peticiones semanales de subsidio por desempleo en Estados Unidos, que disminuyeron en 22.000 la semana, informó el Departamento de Trabajo.

A esa noticia se unió el aumento del 2,7% de los pedidos de bienes duraderos a las fábricas de EEUU en enero, por encima del 2,5% pronosticado por los analistas.

Sin embargo, estos datos se vieron ensombrecidos por la noticia de que la venta de casas nuevas en este país cayó el mes casado un 12,6% hasta una tasa anualizada de 284.000 unidades, menor a las 300.000 que habían calculado los expertos.

La crisis libia también influía en los descensos del parqué neoyorquino después de que el consejero delegado de la petrolera italiana Eni, Paolo Scaroni, afirmase que el país magrebí -el noveno productor de la OPEP-, ha reducido en un 75% su producción petrolífera y ha pasado de 1,6 millones de barriles diarios a 400.000.

Esa caída en la producción provocaba que a esta hora que el crudo de Texas acariciase la cota de los 100 dólares por barril, que ha llegado a sobrepasar esta mañana, al sumar 1,12 dólares para colocarse en los 99,22 dólares por barril.

Además, las compañías energéticas extranjeras que operan en Libia se han visto obligadas a reducir dramáticamente su producción, como es el caso de la hispano-argentina Repsol, que se ha visto obligada a disminuirla a la mitad.

Las acciones de esa petrolera subían a esta hora el 1,75% en la Bolsa de Nueva York, de donde dejará de cotizar a principios de marzo después de 22 años en Wall Street.

Hacia el ecuador de la sesión la mayor parte de los componentes del Dow Jones de Industriales se colocaban en terreno negativo, liderados por Bank of America (-2,12%), la tecnológica Hewlett-Packard (-2,13%) -tras dos días de fuertes caídas por la difusión de unas cuentas que decepcionaron a los inversores-, la aseguradora Travelers (-1,89%) y la cadena de tiendas Wal-Mart (-1,89%), que también decepcionó con sus resultados esta semana.

En el lado de los ascensos se colocaban la aeronáutica Boeing (0,84%), el conglomerado GE (0,89%), la tecnológica Microsoft (0,4%), el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar (0,32%) y la petrolera Chevron (0,33%), entre otras.

Fuera de ese índice destacaba la caída del 5,29% del fabricante de automóviles General Motors, un día en el que anunció que ganó 4.688 millones de dólares en 2010 y que durante el último trimestre de 2010 la ganancia se situó en 510 millones de dólares, ligeramente por encima de lo esperado por los analistas.

En el mercado Nasdaq la tecnológica Apple descendía el 0,54% a pesar de que hoy confirmó la celebración de un acto relativo al iPad el próximo 2 de marzo en el que se espera que vea la luz la segunda generación de sus populares tabletas informáticas.

En otros mercados el oro bajaba hasta los 1.413,9 dólares la onza, el dólar se debilitaba frente al euro (que se cambiaba por 1,3798 dólares) y la rentabilidad de la deuda pública estadounidense a diez años bajaba al 3,44%.