"Es ahora, en los momentos de crisis, cuando el Gobierno y los agentes económicos y sociales más representativos han de estar a la altura de sus responsabilidades para diseñar un escenario de concertación social en el que insertar las políticas más adecuadas para enfrentar la crisis económica y, de modo especial, el desempleo como consecuencia más lacerante de la misma". Éste es el fundamento básico del Pacto Social por la Economía y el Empleo en Canarias que se firmó el 4 de junio de 2009.

El documento incluye una serie de actuaciones a acometer entre 2009 y 2011, pero los ajustes presupuestarios emprendidos en las Islas y a nivel nacional desde el pasado año han desdibujado el escenario en el que se desarrolla el pacto y ponen en cuestión la validez de éste, según sostienen los dos sindicatos que lo rubricaron, CCOO y UGT de Canarias.

Aunque el balance del mismo debía posponerse a finales del último ejercicio que comprende, las dificultades para aplicar nuevas medidas en un contexto de severa restricción del gasto, por un lado, y el alto grado de ejecución del pacto esgrimido por el Gobierno autonómico, por otro, permiten a los agentes que lo firmaron -además de los sindicatos, las patronales provinciales CEOE-Tenerife y CCE, el Ejecutivo y, más tarde, buena parte de los municipios del Archipiélago- analizar si ha contribuido a atenuar la crisis y la destrucción de empleo.

"El pacto se firma en un escenario en el que todas las administraciones, partidos y organizaciones sindicales y empresariales planteamos la reactivación de la economía y la generación de empleo como prioridades absolutas de la política. En mayo de 2010, cuando el Gobierno (central) sitúa como prioridad el pago de la deuda, esa línea política se pierde y el pacto social pierde contexto", lamenta el secretario de Economía y Políticas Sectoriales de CCOO-Canarias, Carmelo Jorge.

"Es inaplicable -recalca- con recortes presupuestarios como los que estamos teniendo". El cambio de prioridades parte del Ejecutivo central, acosado por presiones internacionales para atajar el creciente déficit del país, pero Jorge le atribuye también responsabilidad en este proceso al autonómico, que en mayo del pasado ejercicio planteó un recorte de 300 millones en el presupuesto de 2010 "que era incompatible, por principios, con lo pactado. Y, a partir de ahí, ni las medidas de tipo social ni las económicas se han cumplido".

Para el ex secretario de Política Institucional de UGT-Canarias José Yanes, el pacto "tiene el valor de que en él confluyen los agentes sociales y el Gobierno, lo cual de por sí tiene una extraordinaria importancia porque, en un momento de crisis, dibuja una hoja de ruta que se orienta fundamentalmente al empleo. Pero los dos últimos ejercicios presupuestarios han sido francamente restrictivos, y este escenario, qué duda cabe, constituye un hándicap para lograr los objetivos fijados".

Yanes, en cualquier caso, considera que la tendencia de contención y ligera reducción del desempleo a la que asiste el Archipiélago desde hace un semestre está en relación con las medidas que se han ejecutado. Entre las dirigidas directamente a la generación de empleo, la más destacada es la subvención de las cuotas sociales que pagan los empresarios que contraten a nuevos trabajadores. Pero los resultados de esta medida publicados hasta ahora son pobres, lo que el Gobierno ha atribuido a la resistencia empresarial a realizar contrataciones.

"Hemos puesto en marcha más del 90% de las medidas incluidas en materia de economía y empleo. Están dando frutos y algunas durarán muchos años, pero dijimos, cuando presentamos el pacto, que no era una varita mágica ni la solución a la crisis. Advertimos de que había que transitar un camino difícil para lograrlo, y aún estamos empezando", señala el consejero de Economía y Hacienda del Ejecutivo autónomo, Jorge Rodríguez.

Las cuentas lo respetan

Respecto a las restricciones presupuestarias, Rodríguez, que reconoce que la preocupación "principal" ha pasado a ser la reducción del déficit -aunque "impuesta por el Estado" y concerniente a una deuda que no ha sido generada en las Islas, matiza- esgrime el alto grado de ejecución del pacto. Y remarca que "lo primero que ha salvado el Gobierno de Canarias al aprobarlas es lo básico: los servicios públicos esenciales y lo que recoge el pacto, cuyas medidas son necesarias. No hemos dejado de pagar ni una solicitud con derecho a la bonificación de las cuotas patronales a la Seguridad Social y tampoco se ha dejado de realizar ni un solo plan de empleo, porque son una prioridad".

El documento de junio de 2009 contiene una enorme variedad de medidas, algunas a ejecutar de inmediato, con un efecto de choque sobre la actividad empresarial y la generación de empleo, y otras con un horizonte más lejano, que apelan a la diversificación económica de Canarias, la reforma del Régimen Económico y Fiscal y la ampliación de algunas de sus ventajas o elevar la eficacia administrativa y de las políticas de empleo.

Para la CEOE-Tenerife, el discurso "debe centrarse en lo realmente relevante: que no hay mejor medida y política social que el empleo". Y para estimular éste, subraya su secretario general, Pedro Alfonso, antes se debe dinamizar la economía, "porque no se va a reducir la tasa de desempleo mientras no se recupere la actividad económica".

En este sentido, apunta que "quizás sean las medidas de orden económico las que no hayan sido suficientemente implementadas y, por tanto, no han tenido la repercusión necesaria en el empleo.

Del bloque de empleo, argumenta que las ayudas a la contratación "de nada sirven por sí solas si no existe actividad económica. Y este hecho -apostilla- contribuye a erradicar de la opinión pública que los empresarios sólo viven de subvenciones".

En lo que atañe al objetivo no ya de contratar, sino de mantener el empleo actual, Alfonso echa de menos la aplicación del denominado "modelo laboral alemán", que activa una paga pública ligada a formación con la que los trabajadores a los que se les aplica una reducción de jornada compensan la pérdida de ingresos de ésta. "Bien pudiera haber evitado la pérdida de muchos puestos de trabajo -la medida se plantea como alternativa al despido-, pero no hubo acuerdo entre los agentes económicos y sociales", recuerda.

"Si no se genera actividad económica, no se crea empleo se haga lo que se haga", corrobora el representante de CCOO, que insiste en que haber situado el control del déficit en el epicentro político "impide que se añadan medidas que, entre otras cosas, necesitan que el sector público haga de motor de la economía".

Recuperación incipiente

"El problema es de falta de consumo. Si pones a 100.000 de los parados de Canarias a trabajar y consumir, generarán las condiciones para que dentro de nada otros 100.000 se vuelvan a incorporar al mercado laboral. Pero -avisa Jorge- si sigues restringiendo gastos, probablemente dentro de un año tendremos no 300.000, sino 350.000 parados".

Para lograr ese objetivo, el consejero de Economía y Hacienda sostiene que el pacto social sigue siendo válido. "Estará vigente un año más", señala, confiado en que la contención del desempleo -Canarias está ahora entre las comunidades con menor incremento interanual de la cifra de parados- se consolide en 2011".

También interpreta como positivo que el Archipiélago fuera la autonomía menos inflacionista en 2010, lo que puede favorecer la recuperación económica y se explica en parte por una medida incluida en el pacto: las bonificaciones aeroportuarias, que han atenuado, defiende, el encarecimiento del transporte.

El secretario general de la CEOE-Tenerife manifiesta "sin duda" que el pacto es la hoja de ruta "estructural, aunque sujeta a revisión y seguimiento" para "reformular el REF, reactivar el consumo y recuperar el crédito bancario -el documento incide también en este aspecto- tanto para empresas como para familias".

Más crítico, Jorge apunta que "no hay más que ver la situación económica para comprobar la eficacia del pacto, lo cual es responsabilidad de todos los que lo firmaron, pero más de quien elabora los presupuestos". Yanes, no obstante, cree que "sí sirve", pero "inyectándole dinero".