La economía sumergida alcanzó en España los 205.200 millones de euros en 2009, lo que representa el 20% del Producto Interior Bruto (PIB), según un estudio realizado por la consultora A.T. Kearney y Visa Europa.

El informe indica que el volumen de economía sumergida en España se sitúa cinco puntos por encima de la media de Europa Occidental, en el tercer lugar -compartido con Portugal- con mayor porcentaje respecto al PIB, y el cuarto, tras Alemania, Italia y Francia, en volumen total.

Por sectores, los de construcción, autónomos, comercio, inmobiliario y turismo ocupan las primeras posiciones.

Según el estudio, hay dos factores que favorecen el desarrollo de esta actividad en España, los altos impuestos y el peso de la Seguridad Social.