Más de 14.000 empresas canarias deberán adaptarse a la nueva normativa que regulará desde enero la compraventa de todas las mercancías que entren a las aduanas del Archipiélago. Este dato lo facilitó ayer el vicepresidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife, Modesto Campos, durante la inauguración de una jornada en la que se analizó el nuevo escenario de los Incoterms, que son un conjunto de reglas internacionales de carácter facultativo que definen las obligaciones y las responsabilidades del comprador y vendedor.
Organizada por la institución cameral y el Banco Sabadell, la jornada contó con la presencia del delegado comercial para Tenerife de esta entidad financiera en Canarias, César Mario Andrés Cinca, el director de Trade Finance del Banco Sabadell y miembro de la Comisión Bancaria de la Cámara de Comercio Internacional, Andreu Vilà, y del delegado del Iecx en Santa Cruz de Tenerife, Juan José Lucas de Lorenzo-Cáceres.
Contratos estándar
Según el director de Trade Finance de Banco Sabadell, la nueva regulación, de la que se encarga la Cámara de Comercio Internacional, reduce el catálogo de contratos, con la supresión de algunas modalidades y la creación de figuras nuevas. Concretamente, señaló que hay once tipos de contratos estándar que agrupan el 99,9% de todas las transacciones comerciales, y en los que se incluyen aspectos tan importantes como dónde se entrega la carga, quién asume los riegos y la persona que soporta los gastos y los trámites aduaneros.
A juicio de Vilá, una de las grandes ventajas de la utilización de estos Incoterms es la seguridad jurídica que proporcionan, ya que contemplan los casos más usuales de comercio, a los que solo hay que añadir las características propias de cada comprador y vendedor. "Aquellos empresarios o profesionales que no emplean este tipo de instrumentos están exponiéndose innecesariamente a riesgos que ponen en peligro la viabilidad y continuidad de la relación comercial", comentó.
Durante su intervención, el vicepresidente de la Cámara resaltó que Canarias importa más del 90% de la mercancía que consume, por lo que la actividad comercial es esencial para su funcionamiento. "Anualmente, los empresarios movemos alrededor de 5.000 millones en la compraventa de productos. De ahí la necesidad de ponerse al día en los cambios que afectan a nuestras transacciones comerciales", apostilló.