El presidente de la Asociación Industrial de Canarias (Asinca), Ramón Villalba, pronosticó ayer que la línea de ayudas del programa estatal de reindustrialización (Reindus) correspondiente a 2011 tendrá una gran acogida por parte de los empresarios del Archipiélago, que superarán el centenar de solicitudes contabilizadas durante el presente ejercicio.
Villalba destacó el éxito de la primera edición de estas ayudas en las Islas ya que, según recalcó, "se cubrió completamente la partida de 12 millones de euros asignada para nuestra comunidad, en la que una treintena de proyectos recibieron financiación y los que se quedaron sin ella fue porque se agotaron los recursos". Esta circunstancia, subrayó, "dio pie a que para esta ocasión se incrementara el importe hasta los 21,5 millones que, no obstante, con toda probabilidad se agotará igual que ocurrió este año".
El titular de Asinca, apuntó que "la idea es que cada vez se vaya aumentando la dotación a medida en que crezcan las solicitudes".
Según explicó, las ayudas del Reindus, que en el conjunto del país repartirán 462,4 millones, se dividen en dos grandes ejes. Así, "el primero de ellos destinado a infraestructuras industriales, se vincula a actuaciones de instituciones públicas y contará con una ficha económica de 1,3 millones", apostilló. A su vez, agregó que el segundo de los epígrafes "que acapara más de 20 millones, hace alusión a iniciativas industriales propiamente dichas y, por tanto, está más orientada al ámbito privado".
En cuanto a los subsectores que más recurrirán a estas líneas, dijo que "lo lógico es que primen los proyectos de la industria agroalimentaria, pero lo ideal es que la industria auxiliar de la construcción, que soporta con mayor virulencia la crisis, también concurra a estas convocatorias".
Caída del consumo
En otro contexto, Villalba incidió en que "la industria canaria está pasando por un mal momento, sobre todo por la caída del consumo y la falta de financiación".
De este modo, augura que "el cierre del presente ejercicio no va a representar una gran mejoría con respecto a 2009, ya que también ha sido un año muy duro". Además, coincidió con el diagnóstico de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, al expresar su preocupación por el sector industrial a pesar del repunte del 8,6% del Indicador de Producción Industrial de Canarias, ya que, el tirón de la actividad energética va por otros derroteros muy distintos al del conjunto del sector industrial, por lo que se debería analizarse de manera independiente". Por ello, urgió las grandes medidas estructurales que tiene pendiente el Estado, como la reforma laboral, la financiera y la energética.
Precisamente ayer, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, se reunió con los representantes de las comunidades autónomas para debatir el Plan de Acción 2011-2015 incluido en el Plan Integral de Política Industrial 2020.