El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, aseveró ayer que "el consenso será una de las claves de la gestión en materia turística" a partir de ahora ya que se apostará por "una política de máximo diálogo y participación del sector", aunque puntualizó que "al final las decisiones las tomará el Ejecutivo autonómico".

Rivero realizó estas manifestaciones durante el acto de toma de posesión del nuevo viceconsejero de Turismo, Ricardo Fernández de la Puente, de la directora general de Ordenación y Promoción turística, Rita Hernández, y del director general de Infraestructuras turísticas, Miguel Cabrera.

A lo largo de su intervención, agradeció el trabajo desarrollado por el anterior equipo, del que puntualizó que "siempre gozaron de mi apoyo, independientemente de los aciertos o desaciertos" en su relación con el colectivo.

A su vez, argumentó que "ahora hay que aprovechar para dar un nuevo impulso al turismo en esta recta final de legislatura".

Rivero subrayó que, a pesar de la necesidad de diversificar la economía local, esta actividad sigue siendo la que "mayor capacidad tiene para absorber mano de obra en masa" y, por tanto, "hay que potenciar este motor para que tire de todos los sectores económicos de las Islas y así mejorar la empleabilidad".

De este modo, justificó la incorporación de este departamento en el área de Presidencia, "con el objetivo de que actúe como un eje transversal que trabaje en colaboración con el resto de consejerías".

Por otro lado, defendió que "nos van a ayudar mucho los acuerdos que hemos firmado en Madrid". Así, sentenció que no se puede "anteponer el color político" del partido que gobierne el país para alcanzar acuerdos que ayuden al Archipiélago a mejorar su competitividad.

En este contexto, señaló que "no podemos renunciar los 42 millones de euros para infraestructuras turísticas ni los 50 previstos para 2012, ni tampoco a explorar todas las posibilidades que nos da la quinta libertad" y conseguir que parte de los aviones que cubran trayectos entre África y América puedan hacer escala en Canarias.

Al respecto insistió en que, "si no fuera así, no podríamos cumplir los objetivos que nos hemos marcado de incrementar en un millón nuestro número de visitantes a lo largo del próximo ejercicio", un hecho que, a su modo de ver, significaría unos ingresos adicionales de 1.500 millones de euros y 35.000 nuevos puestos de trabajo.

Por otro lado, Rivero indicó que "vamos a incentivar a aquellas compañías aéreas que sean capaces de utilizar Canarias como base, ya que queremos que haya más aviones que duerman en los aeropuertos de las Islas y que se abran nuevas conexiones con mercados emergentes o que amplíen las frecuencias con los tradicionales". En este sentido, apostilló que "esta medida está contemplada en la nueva estructura de las bonificaciones de las tasas aeroportuarias".

Por último, insistió en "hacer pedagogía" sobre la importancia que tiene el turismo como sector estratégico para las Islas.

Así, enfatizó que hay que concienciarse en que "prestar un buen servicio no es servilismo sino ahondar en la calidad y la excelencia".

De hecho, sostuvo que "si bien tenemos las mejores condiciones ambientales, tras un periodo en el que las cosas han ido demasiado rápido y demasiado bien para casi todo hemos despreciado algunas cuestiones que son elementales como la atención, en lo que ahora mismo nos están ganando otros destinos competidores".